Un informe de la Universidad de Extremadura (UEx) avala la necesidad del sector del cava extremeño de ampliar su superficie de viñedo, pues, según recoge el estudio, la superficie de cava con Denominación de Origen debería incrementarse a nivel nacional en casi 11.900 hectáreas hasta 2030.

Un aumento que, sin afectar a la calidad ni a los precios, conllevaría alcanzar una superficie conjunta de los territorios con Denominación de Origen (DO) de 45.000 hectáreas, todo ello con el objeto de dar respuesta a la demanda internacional.

Esto supone un incremento promedio anual de aproximadamente 915 hectáreas, lo que representa un crecimiento del 2,4 por ciento de tasa anual media, según el informe, que hoy ha sido presentado por sus seis autores y la consejera de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio, Begoña García.

Este informe ha sido adjuntado como prueba pericial en la demanda que esta semana ha presentado la Junta de Extremadura ante el Tribunal Superior de Justicia contra la decisión que adoptó en su día el Ministerio de Agricultura de limitar la ampliación de las hectáreas de viñedo destinadas al cava "bajo la excusa de que un aumento de la producción podría perjudicar" al sector.

"No hay riesgo de devaluación porque Extremadura plante más hectáreas de viñedo para cava, creemos que el mercado está en expansión y que el cava extremeño puede seguir creciendo porque tiene calidad y es competitivo en precio", ha agregado García.

En su opinión, este informe científico "independiente" aclara la situación real del mercado nacional e internacional, y la "incongruencia de reducir las plantaciones de viñedos en lugar de mejorar la promoción, el marketing y la calidad del cava".

En este sentido, la responsable de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio ha indicado que la normativa de la UE abre la puerta a que los estados puedan limitar las superficies de cultivo, pero siempre que esa decisión se adopte en el caso de que sea para evitar un "riesgo bien demostrado de devaluación".

Este riesgo no existe, ha remarcado la consejera en función de los resultados del informe. García ha asegurado a los agricultores de Tierra de Barros y a los profesionales que trabajan en este sector que el ejecutivo autonómico va a seguir con este asunto hasta el final.

"Tenemos tierra, agua, viñas y sabemos hacer un cava de primera calidad, por lo que queremos competir en todos los mercados y no vamos a permitir que nadie nos ate las piernas en esta carrera", ha dicho la consejera.

En los últimos diecisiete años, el cava extremeño viene creciendo a un ritmo medio del 9 por ciento anual, una cifra "impresionante, a pesar de una dura crisis económica de por medio".

Según el estudio, la recomendación de no crecimiento realizada por la DO Cava "contrasta con los incrementos constantes de superficie de otros competidores internacionales".

Así, y a modo de ejemplo, la DOP Proseco realizó una solicitud de ampliación de la superficie de 7.541 hectáreas para hacer frente al constante aumento de la demanda de vinos espumosos a nivel internacional sin que ello esté suponiendo una devaluación del producto. "Todo lo contrario, el precio medio del litro ha pasado de 1,89 a 2,81 euros", han apuntado.