La Asociación Acción por el Mundo Salvaje (AMUS) liberará este viernes, día 30, especies como el búho real, águila calzada, cernícalo primilla y vulgar, mochuelo y cigüeña blanca, que han sido atendidos en su centro de recuperación.

La liberación se efectuará en el Parque Natural de Cornalvo y corresponde a animales intervenidos en "complejas operaciones" y en largos tratamientos o en delicados abordajes de lesiones musculares y de tejidos blandos.

Casi setecientos animales salvajes de diferentes grupos zoológicos han sido atendidos en el hospital de fauna salvaje de AMUS a lo largo del año, con el objetivo de reintegrarlos con las "máximas garantías" de adaptación a su lugar de origen, la naturaleza, según ha informado AMUS en nota de prensa.

Este proyecto comenzó en el año 95, desde entonces hasta ahora por el Centro de Recuperación han pasado miles de animales que han sido asistidos por equipos de profesionales no sólo de las ciencias médicas sino también por expertos en materias y disciplinas como la psicología y el comportamiento animal, la embriología, la incubación, la reproducción, el marcaje y radioseguimiento.

A lo largo de casi estas dos décadas se han alcanzado "grandes avances", y se ha enfatizado mucho sobre el origen de los ingresos intentando ofrecer un servicio de "máxima calidad" dando una verdadera respuesta a una tipología de casos en pacientes principalmente aviares.

De esta manera, en la unidad de hospitalización la especialización en el tratamiento por ejemplo de traumatismos asociados a fracturas óseas, electrocuciones y lesiones por enganches y atropellos han sido objetivos en los que se ha invertido un gran esfuerzo no sólo en recursos económicos sino igualmente en formación y en la búsqueda de los más novedosos avances en el tratamiento de estos procesos traumáticos y patológicos.

En este contexto, según apunta AMUS, se debe tener muy en cuenta que de cada diez animales que se recepcionan, al menos siete lo hacen con cuadros de máxima gravedad, es decir en estado de shock debido a agentes traumáticos o patológicos agravados por ayunos prolongados por la imposibilidad de búsqueda de alimento.

Además se puede deducir que muchos ejemplares mueren sin ser encontrados en el campo o en las cunetas de las carreteras y que el margen de maniobra clínica en los centros de recuperación es "muy escaso" ya que los animales que con suerte ingresan presentan estados muy críticos con muy pocas posibilidades de recuperación.

A pesar de ello, en AMUS con la instauración de un servicio de atención permanente todos los días del año y de recogida de fauna especializado, junto a la puesta en marcha de protocolos de máximo rigor en los tratamientos de urgencias y en los abordajes pre y posquirúrgicos, ha permitido incrementar el número de ejemplares recuperados y liberados.