El sindicato de profesores ANPE Extremadura exigió ayer que los docentes mantengan su sueldo íntegro cuando estén de baja y el reconocimiento del verano para los interinos con 165 días trabajados. En concreto, solicita la derogación o modificación del Decreto 122/2012, por el que se elevó a 280 días trabajados el derecho al reconocimiento de los meses de julio y agosto de los funcionarios interinos.

Lo hace argumentando el tiempo transcurrido, así como la evolución normativa producida desde entonces, «tendentes a derogar los recortes coyunturales y excepcionales aplicados al profesorado». En un comunicado, pidió que se vuelva al acuerdo de marzo de 1994 suscrito «en solitario» por ANPE con el entonces Ministerio de Educación y Ciencia para recuperar el derecho al reconocimiento económico y administrativo de los meses de julio y agosto con 165 días trabajados durante el curso escolar, «además de adaptar el mismo a la nueva realidad económica de la Comunidad Autónoma».

Asimismo, informa de que la Ley de Presupuestos Generales del Estado de 2018 ha concedido la potestad a las autonomías de restablecer el complemento que abona a los docentes y resto de funcionarios de baja para que sigan cobrando el cien por cien de sus retribuciones. «Sólo la publicación en el DOE de dicha medida puede revertir la injusta pérdida económica por enfermar que se nos sigue aplicando al profesorado», aseveró el sindicato.

En este sentido, reconoció que mientras ha existido dicha obligación, la Junta de Extremadura ha ampliado las situaciones en las que el docente pudiera seguir recibiendo el complemento a su sueldo, pero aclara que el profesorado de baja por enfermedad común o accidente no laboral «sigue a día de hoy sufriendo la penalización del 50% de sus retribuciones durante los tres primeros días y el 25% desde el cuarto día hasta el vigésimo».