Un futuro más complejo para Cáceres que para Badajoz, cuya provincia sufrirá más los efectos de la baja natalidad y la emigración de los jóvenes. Son las valoraciones del profesor titular de Análisis Geográfico Regional de la Universidad de Extremadura Antonio Pérez Díaz. Este docente ofreció ayer en Cáceres (en la Fundación del Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos) la conferencia titulada Población y despoblación en Extremadura. Cáceres y Badajoz: su diferenciación provincial. En su charla contextualizó la realidad regional con respecto al resto de España y analizó causas y consecuencias de los problemas demográficos de la comunidad.

-¿Tanta diferencia existe, en términos de despoblación, entre la provincia cacereña y la pacense?

-Las proyecciones demográficas del Instituto Nacional de Estadística (INE) y del Instituto de Estadística de Extremadura, que se van a 2033 y 2031, respectivamente, dicen que Badajoz perderá un 5% de su población, mientras que en Cacerés se llegará al 8,5%.

-¿Por qué Cáceres se verá más afectada? ¿La propia geografía de la provincia? ¿El tamaño de sus pueblos?

-Efectivamente son las dos cosas. Hay mayor territorio de montaña, lo que provoca mayores dificultades; y asociado a eso tenemos que el porcentaje de municipios pequeños (de mil habitantes o menos) en Cáceres es el doble que en Badajoz. Es más difícil que la población se quede ahí. En estos pueblos prácticamente que nazcan niños es ya un acontecimiento. Además los jóvenes se están marchando.

-De manera que los intentos de frenar la sangría poblacional no fucionan.

-Bueno, ¿qué intentos hay? No hay ninguno. El tema este de la despoblación ha empezado a preocupar a los políticos hace un par de años. Antes se pasaba de puntillas sobre este problema; y es un problema muy viejo.

-¿Empezó con la crisis económica?

-Los primeros años de crisis seguíamos ganando población, pero empezamos a perderla a partir de 2013, cuando decían que había unos brotes verdes.

-Las heridas las tenemos claras. ¿La solución?

-Lo que ha habido hasta ahora ha sido anecdótico, como los cheques bebé o las ayudas por nacimiento en los pueblos pequeños. Con dinero no se consigue incrementar la natalidad. La solución más clara es una perogrullada: crear empleo. Es la única manera de mantener a la población. ¿Por qué se van? Porque no tienen trabajo. ¿Se crea empleo? No. Las pocas empresas que había pujantes están despidiendo a un montón de trabajadores sin que nadie diga nada; en otras regiones dicen que van a cerrar una planta de aluminio y se echa todo el mundo a la calle. Y mientras nos vamos dejando ir algunas oportunidades en el camino. No hay nadie que reivindique. Y hay que animar a los inversores. Porque parece que estamos deseando que haya una iniciativa para salir en la tele a decir que no la queremos. Parece que estamos en contra de todo lo que se vaya a hacer.

-¿Crear empleo es solo la solución?

-Y las ayudas para la conciliación, para que se puedan revertir de verdad las cifras de natalidad y podamos pasar a una media dos hijos; ahora estamos en 1,2 hijos. Podrá dar resultado en 30 o 40 años. Es difícil pero hay que hacerlo. Si no, ¿para qué tenemos a los políticos?