Si las asambleas que monta Juan Cuesta, a la sazón presidente de la comunidad de vecinos de la serie de televisión Aquí no hay quien viva acaban, en infinidad de ocasiones, como el rosario de la aurora, la última de la Confederación de Asociaciones de Vecinos de Extremadura (Cavex) no estuvo muy lejos de las ocurrencias de algún que otro guionista de la serie.

En Villafranca de los Barros se reunían el fin de semana pasado los representantes vecinales de Badajoz, Cáceres, Almendralejo y Villafranca para abordar el cambio de directiva. Un relevo que acabó con el anuncio de las federaciones de Badajoz y Cáceres de ir a los tribunales por considerar que la elección de la nueva directiva "es ilegal".

Intercambio de poderes

El martes, a pesar de todo, se llevó a cabo el intercambio de poderes aunque con ausencias significativas como la del presidente saliente de Cavex, Julio Cantero. Aunque los problemas entre las federaciones vienen ya de lejos --Badajoz y Cáceres van por un lado, y Almendralejo y Villafranca por otro--, el enfrentamiento comenzó ya en el momento de la convocatoria para la asamblea ordinaria.

Según, Joaquín Luis María, presidente de la federación de Badajoz, "la convocatoria estaba mal hecha pues incumplía el artículo 15 de los estatutos en los que se dice que la representación en la asamblea se hace acorde al número de socios que cada federación presenta".

Para Manuel Pinilla, hasta ese momento representante vecinal de Villafranca, "ese artículo 15, aparte de parecernos que marginan al resto de federaciones, lleva sin llevarse a efecto dos juntas directivas atrás". Un argumento que Joaquín María cree es débil pues "no se debe hacer caso a la tradición sino a lo que dice el estatuto", por lo que se reservan la posibilidad de recurrirlo en su momento.

Este primer desencuentro se acentuó cuando llegó el momento de elegir la nueva directiva. Con tres representantes por federación, el empate entre los dos bloques hizo que votación tras votación, como ocurrió en el Parlamento vasco, acabara en empate tras empate. Descanso de diez minutos y follón montado.

Según Joaquín María, "el anterior presidente nos dijo que lo mejor era parar para tomar un aperitivo. Lo hicimos, y cuando llegamos nos encontramos con que habían elegido ya la junta directiva a su antojo, por lo que nos negamos a ratificarla al mismo tiempo que solicitamos que una gestora se hiciera cargo del proceso hasta la próxima asamblea".

Para Manuel Pinilla, "lo que pasó fue que un representante de Badajoz se tenía que ir después del aperitivo y como, sin él en la votación, la perdían, no quisieron entrar para ratificar a los candidatos presentados. Nosotros los aprobamos y ya está".

De momento, esto sólo es el principio de una historia que quien sabe si no acaba como la 13 Rúe del Percebe .