La Mesa de la Asamblea de Extremadura acordó ayer, con el voto en contra de Podemos, no tramitar por una cuestión jurídica la propuesta de la formación morada en la que se pedía la reprobación del diputado del PP Juan Antonio Morales por su asistencia a un acto de la Fundación Francisco Franco.

Según explicó a Efe la presidenta de la Cámara, Blanca Martín, la propuesta ha llegado a la Mesa con el informe contrario de los servicios jurídicos de la Asamblea, que han entendido que esta propuesta no se podía admitir, ya que en su primer punto se insta a la Junta de Extremadura a que repruebe por este motivo al diputado del PP y al alcalde de Guadiana del Caudillo, Antonio Pozo.

Para Blanca Martín, la Asamblea no puede pedir al Ejecutivo que repruebe a un diputado, y ha instado a la formación morada a que «reformule» su propuesta, que podría ser a través del articulo 148 del Reglamento de la Asamblea, convocando la Comisión del Estatuto del Diputado.

Blanca Martín reconoce que otros parlamentos sí tienen recogida la figura de la reprobación a un diputado, pero no en el caso de la Cámara extremeña,

Por su parte, el portavoz parlamentario de Podemos, Alvaro Jaén, criticó que esta decisión pone de manifiesto que «otra vez más el PSOE está demostrando que con tal de continuar gobernando y apoyarse para ello en el PP va a aceptar todos y cada uno de los chantajes que le presente y este es el último y seguramente sea el más bochornoso de todos».A su juicio, que el PSOE «recule» para ni tan siquiera formalmente en la Cámara reprobar a un diputado fascista que tenía que estar fuera de las instituciones «es el mayor sonrojo que puede tener un partido que sufrió la dictadura y cuyos militantes fueron perseguidos, encarcelados, fusilados y se fueron al exilio».

Por su parte, el presidente del PP, José Antonio Monago, considera que «no hay que insistir» en este asunto y ha recordado que Juan Antonio Morales ya se disculpó por su asistencia al acto, mientras que, por ejemplo, Podemos no ha hecho lo propio por su actitud ante regímenes como el cubano y aseveró que ni el PP ni él «tienen ninguna añoranza» por regímenes pasados.