La posibilidad de reproducir aspectos de la enfermedad del Alzheimer en modelos de ratones transgénicos creados para tal fin y el estudio a nivel celular y molecular de proteínas esenciales para conocer el funcionamiento del sistema nervioso central han hecho merecedor del primer Premio Eladio Viñuela en Ciencias de la Vida 2010 al investigador madrileño Jesús Avila de Grado. Esos grandes avances y una dilatada carrera investigadora en las enfermedades neurodegenerativas y especialmente en la cura del Alzheimer, que cree posible, le convierten en el protagonista de la primera edición de este premio de la Fundación Caja de Extremadura.

"El problema es que es una enfermedad silenciosa que no nos damos cuenta de que la sufrimos hasta que ya es tarde y hay neuronas muertas y daño en el tejido cerebral. Eso es difícil arreglarlo", pero no imposible. De ahí el valor de sus investigaciones que están permitiendo ahondar precisamente en el diagnostico precoz del Alzheimer. "Si tuviéramos algún tipo de marcador inicial de la enfermedad, cuyo origen en el 99% es esporádico y no familiar, los tratamientos podrían comenzar más inicialmente y se podría solucionar el rápido avance de la degeneración".

Ese es el principal reto en el que trabaja con los ratones a los que inducen esta patología y a los que han podido curar. Ahora queda conseguir en las personas lo que ya hace en estos animales y para eso la detección es fundamental, destacó el premiado, doctor en Ciencias Químicas y director del Centro de Biología Molecular Severo Ochoa, además de profesor de investigación en el CSIC y miembro de la Real Academia de las Ciencias Exactas, Físicas y Naturales.

Son algunas de las conclusiones de Avila tras ofrecer una conferencia en el Centro de Cirugía de Mínima Invasión Jesús Usón en Cáceres, y que escucharon alumnos y profesionales sanitarios, antes de recibir su premio: un diploma y 30.000 euros. Un reconocimiento que acepta como un estímulo para, "a pesar de que ya se trabaja mucho, trabajar aún más", dijo.

De las palabras del científico se deduce que ayer no fue el único reconocido. "Lo que más satisfacción me da es recibir el premio que lleva el nombre de uno de los mejores científicos que hemos tenido. Eladio Viñuela (1937-1999) era un hombre con un gran mérito pero no reconocido lo suficiente", por eso alabó este premio. Viñuela, Medalla de Extremadura, nació en Ibahernando y dedicó 30 años a la investigación, especialmente sobre la peste porcina africana, y creó una gran cantera de científicos, Avila entre otros. Su mujer, la también investigadora Margarita Salas, agradeció ayer emocionada la creación de este premio, "un reconocimiento a la labor de Eladio en su tierra".

Por su parte, la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, destacó que era un acto "especialmente emotivo" para ella como "discípula" de Salas e investigadora junto a Viñuela y Avila. Durante su intervención señaló el momento de inflexión en el que se encuentra la ciencia en España, que este año ha llegado a máximos históricos en inversión en i+D+I, superando la media europea, y cuenta con un 33% más de investigadores que hace seis años y con el doble de recursos disponibles, dijo.

Mientras, el presidente de la Junta alabó la labor de Avila y la apuesta por la ciencia de la ministra, que ha contribuido a desarrollar leyes, como la de Dependencia, para mejorar la vida de los ciudadanos. El acto contó además con el presidente de la Fundación Caja de Extremadura, Jesús Medina, y el presidente de la Caja, Víctor Bravo, que elogiaron al premiado y que aseguraron mantener su compromiso con la inversión investigadora y con el galardón, que será anual.