Desde su creación en 1992, la Fundación Academia Europea de Yuste ha centrado su interés en el acercamiento entre Europa y Extremadura. La vía elegida para estrechar los vínculos entre ambas realidades ha sido la cultura, como camino que asegura la participación efectivas de los extremeños en el ámbito europeo.

La fundación nace con el deseo de revalorizar la estrecha vinculación del Monasterio de Yuste con la vida y muerte del emperador Carlos V. El valor simbólico del monasterio y la significación histórica del último emperador de Europa otorgan a la fundación una sólida dimensión extremeña, española y europea. Esta institución decanta sus intereses hacia el conocimiento y la difusión de las raíces históricas y culturales de los pueblos.

El conocimiento del mosaico de culturas europeas constituye el fundamento esencial de toda futura integración. Asumiendo esta premisa, la fundación realza la importancia de cada una de esas piezas, pretendiendo conciliar la diversidad evidente de las culturas europeas y la unidad identificable de Europa.