Los estudiantes que hayan solicitado la beca del Ministerio de Educación o de la Junta no tendrán que pagar mensualmente la cuota de la residencia universitaria donde se alojen hasta que tengan resolución firme o les sea abonada la ayuda.
Esta es una de las principales novedades principales que recoge la nueva normativa que regula el funcionamiento interno de las cuatro residencias dependientes de la Junta de Extremadura y que está actualmente en trámite, en fase de exposición pública en el Portal de Transparencia.
Según confirma la Consejería de Educación, la intención es actualizar el antiguo reglamento que data del año 2009 e introducir algunas mejoras para los usuarios. En concreto, Educación permitirá que los alumnos solicitantes de beca puedan aplazar el pago de las mensualidades fraccionadas (este año son 385 euros al mes) hasta el cobro de la ayuda. «En cuanto se efectúe el pago de las becas concedidas, el alumno realizará el abono de las cuotas pendientes», explican desde la administración educativa.
A esta novedad se suma otra que en la práctica no es tal pero sí es la primera vez que se introduce en el decreto de funcionamiento de estos centros. Se trata de la ampliación de usuarios que pueden hacer uso de estos centros a otras enseñanzas más allá de la universidad. Así, la nueva normativa incluirá que podrán alojarse en las residencias universitarias de la Junta de Extremadura los estudiantes de ciclos formativos de Formación Superior de grado superior, los que estudien enseñanzas artísticas (Diseño, Música y Arte Dramático) así como otras enseñanzas de régimen especial como Artes Plásticas y Diseño, y enseñanzas deportivas.
En la práctica esto ya se viene haciendo. Al menos en las dos últimas convocatorias de plazas de residentes (que sale en mayo) ya se contemplaba esta posibilidad, aunque bien es cierto que el número de plazas para estos estudiantes es limitado. Esta opción también se permite a quienes cursen un máster universitario.
La Junta de Extremadura cuenta con cuatro residencias repartidas en tres ciudades: Juan XXIII en Badajoz, Diego Muñoz Torrero y Mario Roso de Luna, ambas en Cáceres, y la residencia del Complejo Educativo de Plasencia. Entre las cuatro suman alrededor de 450 plazas y cuestan un total de 385,60 euros mensuales. Este precio incluye la estancia y la alimentación en pensión completa (de lunes a viernes), entre otras actividades y servicios.
