El director de la entidad pública ICEX España Exportación e Inversiones en Extremadura, Ramón Montero de Espinosa, incidió ayer en que un brexit abrupto tendrá consecuencias «sí o sí» en las empresas extremeñas que exportan a tierras británicas, y que por ello hay que prever cualquier escenario futuro. Montero de Espinosa indicó que desde el Gobierno se pide a las empresas extremeñas que venden al Reino Unido que hagan planes de contingencia y que valoren cómo incidirán los diferentes escenarios posibles en aspectos como los aranceles o la logística.

Precisó que a día de hoy se desconocen los efectos que tendrá el brexit, pues «actualmente nadie sabe qué va a pasar, no lo saben ni los propios británicos». Sin embargo, una salida «abrupta» tendrá consecuencias, no solo por la imposición de aranceles, sino por el mayor tiempo que las empresas exportadoras perderán en logística y transporte. La imposición de trámites de salida de la UE y de entrada a Reino Unido provocaría, por ejemplo, que un camión con fruta tenga que sufrir más tiempos de espera por trámites aduaneros, lo que «afecta, y mucho» a productos perecederos.

Aunque este país supone aproximadamente el 5% del total de las exportaciones extremeñas, la trascendencia se dejará notar: «Si a mí me quitan un 5% del sueldo, me parece bastante», adujo. Además, hay empresas concretas, principalmente del sector de los productos agrícolas, cuya exportación en el Reino Unido supone un 15% de su total de ventas, y por tanto sus costes en dinero y tiempo se podrían ver incrementados de forma considerable. Paradójicamente, las exportaciones extremeñas a este país crecieron un 37% durante 2018.