España recibirá sin ningún tipo de problema los fondos comunitarios para financiar los tramos de alta velocidad entre Madrid y Badajoz aunque Portugal decida paralizar los proyectados en su territorio. Así lo afirmaron ayer fuentes de la Comisión Europea, que explicaron que las partidas están asignadas a cada Estado miembro y, por tanto, las decisiones unilaterales que adopte cada uno sobre estas inversiones no tienen por qué afectar al resto aunque se trate de iniciativas interfronterizas, como es el AVE Madrid-Lisboa.

Estas mismas fuentes también aclararon que, en el caso del Gobierno luso, siempre podría negociar con los organismos comunitarios una prórroga de los plazos o cambiar el destino de los Fondos de Cohesión que Bruselas asignó al AVE portugués. Más difícil sería pactar --apunta-- una modificación sobre los Fondos de la Red Transeuropea de Transporte, que también aporta dinero.