Caja Extremadura ha impulsado un nuevo modelo de atención al cliente con el objetivo de reducir los tiempos de espera de los usuarios en sus oficinas, un proyecto en el que la entidad perteneciente al Grupo Liberbank ha invertido más de medio millón de euros. Estos fondos se han destinado a modernizar las instalaciones y a la adquisición de medios y dispositivos para permitir el acceso de los usuarios con mayor fluidez a las operaciones que se realizan con más frecuencia en las ventanillas de las oficinas, como sacar dinero o consultar el saldo de la cuenta, según informó ayer Caja Extremadura en un comunicado.

Con el más de medio millón de euros que ha invertido la entidad, se ha dotado a las oficinas de equipamiento en automatización de procesos, se han realizado mejoras tecnológicas, se ha impartido formación a los empleados y se ha puesto en marcha un plan para adecuar el espacio y la creación de tres zonas diferenciadas en los centros de trabajo (recepción, espera y atención).

Entre las mejoras instaladas, la entidad destacado el 'Gestor de cola', una aplicación informática cuya misión es redireccionar al cliente hacia el gestor más adecuado en función de la operación solicitada. Para ello, se dispone de un dispensador de turnos y de un dispositivo que informa si la operación la puede realizar en un cajero, el tiempo estimado de espera y el número de personas que la anteceden. El sistema también proporciona una mejora en el tiempo de espera a través de la creación de un espacio confortable en el que se dispone de una pantalla informativa que presenta los números atendidos.

Mediante esta iniciativa, la entidad explica que pretende reducir las colas, lograr un tiempo de espera más útil, aumentar la privacidad e incrementar la satisfacción de los clientes, entre otros fines. La inversión se ha completado con la instalación de 29 cajeros automáticos nuevos (cuenta con 200 en la región) en zonas rurales de escasa densidad demográfica que carecían de este servicio.