Los alcaldes de la comarca de Campo Arañuelo subrayaron la importancia del plan económico alternativo, comprometido por la Junta de Extremadura para esta zona en caso de que no se amplíe la concesión de la Central Nuclear de Almaraz más allá del año 2010, al considerar que absorbería el impacto que ese cierre podría generar en materia de empleo y de creación de riqueza.

Así lo señaló ayer el presidente de la mancomunidad integral de municipios de Campo Arañuelo y alcalde de Casatejada, Agustín Miguel Hernández, tras mantener una reunión con el vicepresidente de la Junta, Ignacio Sánchez Amor.

Hernández explicó que la mayoría de alcaldes de la zona opta por que la actividad de la central nuclear continúe, toda vez que supone la continuidad del tejido económico y social de la comarca. En el caso de que la actividad continúe en la central, indicó, la Junta mantendría su postura acerca de la posibilidad de plantear nuevas condiciones desde el punto de vista de la fiscalidad para aceptar esa situación.

Los alcaldes consideran que el cierre de la nuclear conllevaría "una merma importante".