El campo extremeño pierde hectáreas. Así se desprende de los datos facilitados por la Consejería de Agricultura, que indican una reducción del 3% de la superficie cultivada de cereales, oleaginosas y proteaginosas --obtenidos a partir de la declaración de superficie efectuada en la solicitud única de las ayudas-- esta campaña, lo que significa que se han sembrado unas 13.000 hectáreas menos que el año pasado.

Para los responsables de la Junta, este descenso, que sería similar al registrado a nivel nacional --donde el área cultivada se ha reducido en unas 315.000 hectáreas, lo que supone un 3,5% menos--, no resulta relevante, ya que consideran que es consecuencia de la "dura sequía que se ha sufrido en los dos últimos años". Sin embargo, en el sector agrario no lo tienen tan claro.

Así, desde la asociación agraria UPA-UCE sugieren otra razón, aparte de la ausencia de lluvias: el efecto del desacoplamiento de las ayudas de la Unión Europea (UE), como consecuencia del primer año de aplicación del régimen de pago único. "El nuevo sistema desvincula la subvención del hecho productivo", explica Javier Alejandre, técnico del sindicato, "ya que ahora el 75% de la ayuda está desacoplada, es decir, no depende de la producción actual".

Esta situación provoca, según los responsables de UPA, que muchos agricultores se cuestionen si les resulta rentable cultivar sus tierras. En muchos casos, la respuesta, señala Alejandre, es negativa: "Tienen qué calcular si los ingresos por venta más el 25% de las ayudas (con el resto ya cuentan) cubren los gastos. Ante este dilema, muchos productores, sobre todo los dueños de explotaciones grandes o con bajo rendimiento, van a optar por no arriesgarse".

A pesar de que el descenso de este año no es significativo, para UPA representa "una tendencia a la pérdida de capacidad de productiva", que perjudicará a cultivos como el tomate o el tabaco, por destacar dos de los más comunes en Extremadura. Por ello, el sindicato exige medidas para mitigar "la inestabilidad derivada de que Bruselas esté continuamente cambiando las reglas del juego", explica Alejandre.