Llueve sobre encharcado en las denominadas vegas del Tiétar. El terreno se encuentra especialmente blando, lo que hace que los tractores permanezcan parados, sin poder realizar las faenas agrícolas, propias de esta época del año.

Entre tanto los agricultores matan el tiempo poniendo a punto la maquinaria que utilizarán en cuanto abra los ojos el sol "y podamos entrar en las tierras", señalan Carlos González Aparicio, José González Gómez y Jesús González Gómez, que en la plaza Mayor del poblado de Mesillas, propiedad del Ayuntamiento de Aldeanueva de la Vera, se afanan en cambiar los discos de la grada de un tractor. Se quejan de "lo caro que valen" los citados discos, "y eso que hemos comprado de los más baratos".

Son arrendatarios de terrenos en la finca municipal, lo que hace que "salgan peor" a final de cada campaña que los agricultores que tienen tierras propias. "Todavía no sabemos en que quedará todo esto de la Política Agraria Común (PAC) y las directrices europeas, pero lo que sí es seguro es que estamos con la soga al cuello", mientras cada año obtienen menos beneficios. Aseguran que todo sube, menos los productos que cultivan: tabaco y pimiento, generalmente.

De entrada reconocen que en el asunto teórico de las normas que viene de Europa, entre ellas la PAC, "estamos un poco verdes, máxime teniendo en cuenta de que aún no hay nada decidido de forma definitiva". Sin embargo, están en contra de la propuesta que apunta a que "quieren dar el mismo dinero al regadío que al secano, lo que sería fatal, teniendo en cuenta los elevados costes que tenemos nosotros aquí para producir, tanto tabaco como pimiento".

Estiman que la concesión de kilos de tabaco que tienen por parte del ayuntamiento se queda corta, "en torno a los diez mil kilos, y eso es poco. Este año nos han dado otros mil kilos más". Esta situación les obliga a plantar pimiento para pimentón, con el fin de compensar un poco la pérdida de renta, "pero como los exportadores están asfixiados de la cantidad de pimiento que hay", los precios de la producción que no está en el contrato suscrito bajan. Pocos kilómetros más adelante en la Bovadilla de Jaraíz de la Vera, tiene su finca Juan Garzón. Este es propietario de las tierras donde planta tabaco Burley --conocido popularmente como negro-- y pimiento.

Pese a que es propietario, las quejas son parecidas a las de los arrendatarios de Mesillas, "ya que los gastos de producción aumentan más que el nivel de vida. En 2011, el gasóleo agrícola, aproximadamente costaba entre 75 y 80 céntimos de euro, y actualmente nos lo están cobrando, puesto aquí en los depósitos, sobre un euro o uno con cinco céntimos". Esto quiere decir que ha subido "entre un veinticinco y un treinta por ciento en dos años, y la luz exactamente igual. Ahora vamos a los precios del tabaco y lo hemos vendido casi un 4% más barato que la campaña anterior, y el pimiento, aún estando firmados los contratos, también nos lo han bajado veinticinco céntimos en kilo". Garzón estima que la Junta de Extremadura y la Denominación de orígen Protegida Pimentón de la Vera, "tendrían mucho que decir en eso".

En cuanto a jornales señala que tiene entre dos y tres trabajadores en época de recolección, "para nosotros sí han subido, sin embargo el obrero prácticamente no nota la subida, porque es mínima, es más los hay que hasta se ofrecen por menos dinero, debido a que no hay trabajo". También reconoce que "vienen de otras profesiones, incluida la construcción, y de otras nacionalidades, como los marroquíes".

A Juan Garzón, Carlos, José, Jesús y tantos otros no les salen las cuentas, en parte porque a los motivos que acaban de apuntar, la producción de tabaco está asentada en los países pobres de la Unión Europea. Mientras las nubes dan una pequeña tregua en el baño diario que propician a las parcelas, muchas de ellas anegadas desde hace varias semanas por culpa del temporal, que parece haberse estancando en el norte de Cáceres, y en ascuas también hasta saber cómo afectarán las medidas de Europa a sus cosechas.