El Consejo de Gobierno ha acordado iniciar los trámites para la cesión de la carretera Cáceres-Badajoz (Ex-100) al Gobierno central para que asuma el proyecto de conversión en autovía, con el objetivo de que antes de diciembre de 2020 se haya iniciado la obra.

Así lo ha anunciado el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, tras la reunión del Consejo de Gobierno, que ha avanzado que en los próximos seis meses se actualizará el proyecto y se remitirá al Gobierno, con el objetivo de que en los primeros meses de 2020 se liciten.

Con ello, se pretende que no caduque la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) de este proyecto, fijada en diciembre de 2020, según ha explicado Fernández Vara, que ha recordado que para el desarrollo de este proyecto había dos posibilidades: que la construyese la Junta con dinero procedente del Estado o el Ministerio de Fomento.

Fernández Vara ha asegurado que se ha entendido que "lo más operativo desde el punto vista presupuestario" es que la construya el Ministerio de Fomento con sus recursos y porque además "es de las pocas carreteras, sino la única, que une dos capitales de provincia y no es carretera nacional".

De este modo la Ex-100 pasará a ser la A-58, Trujillo-Cáceres y Cáceres-Badajoz, que espera "sea una realidad cuanto antes" y ha considerado esta decisión "estratégica" por lo que significa unir los dos grandes núcleos de población y poder hacerlo en el corto plazo.

El presidente de la Junta se ha mostrado convencido que es un proyecto que también será asumido por el gobierno que salga de las próximas elecciones, "porque nadie se ha opuesto a este proyecto, es un protocolo que está firmado y por tanto compromete a las dos administraciones".

"En ningún momento el Gobierno de España ha dudado de que la tienen que pagar, la discusión no ha estado ni en el cuánto ni en el cómo, sino en la mejor manera de llevarlo a cabo", ha indicado.

Esta actuación formaría parte de un proyecto de actuaciones en carreteras en las que trabaja la Junta de Extremadura con el Gobierno central para que cuando el grueso de las infraestructuras ferroviarias estén terminadas, Extremadura siga teniendo inversiones importantes en la región.

En este sentido, ha explicado que ayer hubo una reunión con representantes de Fomento y en el paquete de esas actuaciones también se abordaron otras autovías, el puente de Alcántara, el de Cedillo o la N-430, además de que la conexión con Ciudad Real sea con autovía en el caso de que siga adelante el macroproyecto de Castilblanco.