Las carreteras extremeñas se cobraron el año pasado la vida de 42 personas, dos menos que durante el 2014. Así lo puso ayer de manifiesto el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, que hizo balance de las siniestralidad en las vías interurbanas durante el año que acaba de terminar. Mientras en el conjunto del país, el 2015 pasa a la historia como el año en el que se registró un nuevo mínimo histórico en el número de víctimas mortales por accidente desde 1960 --se han registrado 1.126 fallecidos por accidente, seis menos que en 2014--, en Extremadura supone el segundo mejor dato en la serie histórica.

Durante el año 2013, la región contabilizó 36 muertes por accidente en vías interurbanas, según los datos difundidos por el ministerio. No obstante, la cifra vuelve ahora a caer tras la subida experimentada en el 2014, cuando hubo 44 víctimas mortales en las primeras 24 horas tras el accidente. Desde el año 2011 no se supera el medio centenar habitual en los años anteriores.

La evolución fue contraria en las dos provincias extremeñas. En Badajoz la cifra de fallecidos bajó en cinco personas, mientras que en la de Cáceres subió en tres muertes más respecto al año anterior. Las salidas de vía siguen siendo la principal causa de mortalidad en las carreteras del país, concretamente suponen el 40% del total, y las carreteras secundarias concentran el 80% de los accidentes mortales.

EVOLUCION DESIGUAL En el conjunto del país el año 2015 terminó con 1.126 muertes en las carreteras lo que supone seis fallecidos menos que en 2014 cuando se contabilizaron 1.132 víctimas a 24 horas. El descenso de víctimas durante 2015 fue desigual entre las comunidades. Hay ocho comunidades que aumentaron el número de fallecidos --destacan Cataluña 23 más que en 2014; Castilla y León 28 más y País Vasco 21 más--, mientras el grueso de comunidades experimentó datos a la baja. La mayor caída de muertes se ha registrado en Andalucía (23 menos), Galicia (19 menos), Murcia (17 menos) y Navarra (16 menos).

El ministro destacó ayer que hubo 17 días del año pasado en los que no se registró ninguna muerte frente a los 34 de 2014 y reseñó el aumento de víctimas mortales en ciclomotores y motocicletas en el conjunto del país. En el primer caso, pasan de los 17 fallecidos en 2014 a 28 el año pasado, mientras que las motocicletas aumenta de 170 a 219 víctimas. Esta situación, explicó la directora general de Tráfico, María Seguí, se debe a varias causas como la mayor movilidad registrada en los últimos años (de un 4% ), el uso de vehículos más antiguos y mal mantenidos, así como que los usuarios no están adecuadamente protegidos.

TURISMOS También aumentaron las víctimas al volante de camiones (cinco más en el conjunto nacional), mientras que el número de muertos de turismos ha descendido (de 591 en 2014 a 569 en el 2015), así como el de ciclistas (con 42 víctimas, 6 menos que el año anterior); autobuses (de 23 víctimas a 1) y peatones (de 114 a 113).

Desde Interior destacaron que, de los fallecidos a bordo de un turismo, 141 no llevaban puesto el cinturón en el momento del accidente mortal, frente a los 164 de 2014. El ministro apuntó que los datos generales suponen una continuación con la tendencia a la baja registrada en los últimos años. "Una sola vida humana perdida en las carreteras es una razón para trabajar en la seguridad en las carreteras, hace diez años había 3.000 muertos. Todavía son demasiadas las que se han perdido, con que haya una, nos consideramos no satisfechos y motivados para seguir trabajando", concluyó.