Casatejada, localidad enclavada dentro del Campo Arañuelo, además de en los encuentros llevados a cabo por el general Franco y Juan de Borbón, ha recibido en múltiples ocasiones visitas de personajes de la realeza y la alta alcurnia. En 1515 pasa por allí el rey, Fernando el Católico, y en 1710 Felipe V, en plena Guerra de Sucesión, permanece en Casatejada tres meses.

Posteriormente han continuado llegando destacadas personalidades, motivadas por la construcción de un palacete pequeño y coqueto por el primer marqués de Comillas. Después el inmueble pasó a depender de distintos propietarios, hasta llegar a la propiedad actual de la marquesa de Monteagut. "En la época de las reuniones entre Franco y el conde de Barcelona, el Palacio de las Cabezas era propiedad del conde de Ruiseñada, jefe de la casa de don Juan", lo que unido a la equidistancia entre Madrid y Portugal, donde estaba instalada la Casa Real, contribuyó a que estos encuentros se llevaran a cabo en Casatejada, según el cronista oficial Juan José Gómez.

En cuanto a ambas reuniones, asegura que "nos vinieron grandes, ya que el pueblo no sabía nada con anterioridad".