Casi setenta de cada cien inmigrantes que viven en Extremadura piensan que su futuro está en la región, y la mayoría muestran una buena impresión sobre las actitudes de los extremeños hacia ellos. Un estudio realizado en toda España por la compañía ACNielsen señala que el 69% de los extranjeros que están en España muestran su disposición a seguir en el país, y la mayoría de ellos se consideran integrados y no perciben discriminación alguna.

Sin embargo, los extranjeros que viven en Extremadura no son los más convencidos de fijar su residencia en España, ya que manifiestan una predispoción al respecto muy por debajo de aquellos que trabajan en regiones como el País Vasco, Navarra y La Rioja, donde el 82% de los inmigrantes señalan su intención de seguir viviendo en el futuro. Además, en la Comunidad Valenciana, casi ocho de cada diez aseguran que les gustaría fijar su residencia en territorio español, algo que comparten el 76% de los extranjeros que residen actualmente en Cataluña.

El estudio muestra, por el contrario, que casi el 35% de los inmigrantes residentes en la comunidad de Madrid manifiestan no tener pensado seguir viviendo en España --en este sentido la satisfacción está por debajo del 69% de media--, al igual que sucede en Andalucía, donde el 68% de las personas de otros países dicen que sí les gustaría seguir donde están.

Pero, este ránking de aceptación de la forma de vida en España lo cierra la comunidad de Castilla y León, en la que sólo el 52% de los extranjeros creen que seguirá viviendo en el futuro en esas tierras.

´SIN PAPELES´ Según los últimos datos sobre población inmigrante, en Extremadura hay casi 27.000 extranjeros y, a juzgar por este estudio, a la mayoría le gustaría seguir residiendo en tierras extremeñas. Pero, ese deseo tiene que estar unido a la legalidad. Según los últimos datos, la cifra de extranjeros en situación irregular en Extremadura se ha triplicado en apenas un año, pasando de menos de 3.000 en el 2003 a superar los 10.000 a principios de este año.

Según el padrón publicado por el Instituto Nacional de Estadística (INE), a finales del 2003 había 20.066 inmigrantes censados en la región. De ellos, 16.361 eran no comunitarios; es decir, no beneficiados del libre tránsito de personas entre los países de la Unión Europea. Para las mismas fechas, el número de extranjeros que residían en situación legal en Extremadura era de 17.123, lo que hace que otros, 2.943, al menos, estuviesen en situación irregular.

En marzo del 2005, y según los datos que tiene UGT, la cifra de extranjeros empadronados en los distintos municipios de la región sumaba ya casi 27.000, de los que más de 23.000 eran no comunitarios. Mmientras, el número de inmigrantes en situación legal había bajado ligeramente respecto al año anterior, quedando en 16.614, lo que quiere decir que la cifra de extranjeros sin la documentación en regla se ha disparado hasta superar los 10.000.

Por otro lado, el informe de ACNielsen destaca que casi la mitad de los encuestados en España, el 47%, está seguro de que fijará su residencia en nuestro país, y otro 22% lo da casi por hecho; mientras que sólo el 12% se decantan por un futuro lejos de las fronteras españolas.