Fue en el año 2003. El Ayuntamiento de Castuera empieza a cobrar, la cifra fijada fue 1.200 euros al año, a las entidades bancarias con cajeros automáticos en la vía pública, y se convirtió así en la primera localidad extremeña que decidió aplicar esta medida, que después han seguido otras, además del ejemplo ya reseñado de Villanueva del Fresno, que cobra 720 euros al año.

La medida no gustó a los bancos y la patronal de las cajas, CECA, presentó un recurso de casación, pero en febrero pasado el el Tribunal Supremo (TS) dictó una sentencia en la que avala que los consistorios cobren a las entidades financieras una tasa por los cajeros automáticos que se sitúan en la vía pública.

Ese camino marcado por Castuera lo han seguido otros municipios extremeños como Don Benito, donde el ayuntamiento cobra una tasa de 500 euros al año por cajero; en Villanueva de la Serena, cuya cuantía cae hasta los 300 euros al año y que reportó el pasado año 3.600 euros al consistorio; informa Mercedes Martín. También la recoge Almendralejo, donde la tasa anual oscila entre 258 y 430 euros por cajero dependiendo de las calles en los que estén ubicados. En esta localidad, la tasa se denomina "por aprovechamiento especial de terrenos de dominio público, cajeros automáticos con acceso directo en la vía pública", informa María de los Angeles Parra.

En Plasencia, la corporación municipal aprobó en el pleno del 26 de octubre la creación de esta tasa que entrará en vigor el próximo año, y que será de 1,25 euros diarios por cada cajero que esté en la calle, informa Raquel Rodríguez.

Sin embargo, hay otros ayuntamientos que o bien lo han descartado o no contemplan esta tasa entre sus prioridades. Es el caso de Badajoz, que asegura que no creará este impuesto después de que un estudio realizado por los servicios municipales en el año 2007, y que evidenció la escasa recaudación que reportaría --menos que la obtenida por la ubicación de veladores-- porque los bancos tienen ya pocos cajeros en la vía pública, según el concejal de Hacienda, Alberto Astorga, informa Fernando León.

Cáceres y Mérida

El Ayuntamiento de Mérida anda en esa misma línea y, sin descartar nada en el futuro, no es una cuestión que tenga encima de la mesa en estos momentos, según la concejala delegada de Hacienda, Mercedes Moyano.

En la ciudad de Cáceres, la intención es aplicarla, pero todo depende de un estudio económico previo para calcular la rentabilidad, y que en caso de fijar una tasa, ésta debe definir el hecho imponible, señala el concejal de Hacienda, Lorenzo de la Calle, informa José Luis Bermejo.