Los representantes legales de la cooperativa frutícola Caval, de Valdelacalzada, presenta hoy en los registros generales de los juzgados de Badajoz una solicitud de concurso voluntario de acreedores ante la imposibilidad de llevar a cabo el plan de viabilidad acordado debido a un agujero económico de 25 millones de euros, que es la cantidad a la que asciende la deuda contraida con bancos y acreedores.
El desencandenante de esta quiebra ha sido la reclamación por parte de Coenca, uno de las empresas acreedoras, de 1,3 millones de euros, y de otros 3 millones de euros que le exige Sofiex en concepto de un aval firmado por el anterior consejo rector y su gerente, algo que desconocían los cooperativistas, por lo que se ha dado traslado al juzgado por si fuera objeto de querella por falsedad documental.
El secretario del consejo rector de Caval, Juan Miguel Gasco, asegura que "la rectora de Caval se siente engañada por la Junta de Extremadura, que en ningún momento nos comunicó nada de este aval, sólo cuando el pasado día 5 nos ha llegado la reclamación", a pesar de que se firmó en el 2005. También han solicitado un ERE con carácter temporal que afectará a los 22 trabajadores fijos que tiene Caval en plantilla.
