CCOO de Extremadura ha manifestado que la Encuesta de Población Activa (EPA) demuestra que la región se ha visto "gravemente perjudicada" por las políticas de empleo impuestas estos últimos años por el Gobierno de José Antonio Monago, que ha dejado un mercado laboral en una situación "muy preocupante".

Según CCOO, Extremadura es una de las comunidades con "peor comportamiento anual", con "una caída de la población activa intensa", que es la que explica "realmente" la bajada del paro, y un "desmoronamiento" de los trabajadores por cuenta propia, lo que evidencia "el fracaso de las políticas del emprendimiento del PP".

Además, ha señalado que la región sufre con un contexto laboral para las mujeres "muy complicado", ya que del descenso de desempleo en este año "sólo se han beneficiado" los hombres, y se sigue con niveles elevados de paro de larga duración en todas las edades, algo que debería hacer "saltar todas las alarmas".

En su opinión, el crecimiento de un 1,46 por ciento del empleo en el último año es "totalmente insuficiente" si se tiene en cuenta la "elevadísima" tasa de paro que soporta la región.

Del mismo modo, ha aclarado que la bajada del paro en el último año y en el trimestre obedece en gran parte a la "destrucción de población activa" y, por tanto, "no están vinculadas en su totalidad a creación de empleo".

Por ello, entiende que la política de fomento del autoempleo del Gobierno de Monago, en la que se invirtieron "tantos recursos económicos y que tanto dio para mensajes publicitarios", ha demostrado ser "un fiasco absoluto".

En este sentido, ha advertido de que en 2015 se redujo "en casi 7.000 el número de personas con trabajo por cuenta propia".

Para CCOO, las cifras hoy publicadas confirman una situación ya anunciada por el sindicato y revelan la "atonía" de la economía extremeña, por lo que cree necesario un cambio "radical" en las políticas económicas y de empleo.

También ve fundamental la aprobación de unos presupuestos regionales lo antes posible como "palanca para la reactivación" y una mayor solidaridad del Estado en materia de inversión pública.

A su juicio, la reforma laboral ha "desguazado" especialmente el mercado de trabajo extremeño con "más desempleo, bajada de salarios, profundización de un modelo de servicios baratos y dependencia de sectores de escaso valor añadido".

Las consecuencias, ha continuado, conducen al envejecimiento de la población y a la emigración de las personas jóvenes, todo ello conjugado con el reparto del escaso empleo que se genera a través de la contratación a tiempo parcial.