Cerca de un centenar de personas se manifestaron en la tarde de ayer en el centro de Mérida, bajo la lluvia y el frío, para protestar contra los recortes sociales del Gobierno, convocados por diversas organizaciones sociales, sindicales y políticas. La convocatoria era secundada, entre otros colectivos, por IU, PCE, CNT, CSU, la asambleas de parados de Badajoz, Mérida y Almendralejo o el colectivo La Trastienda de la capital extremeña, según informó una de sus miembros, María Luisa Prudencio.

Los manifestantes rechazaron la jubilación a los 67, la subida de la luz, los desahucios de viviendas, los privilegios de los políticos o la eliminación de la ayuda de 426 euros de los parados. Los recortes que está aprobando el Gobierno cuentan con la "connivencia", a su juicio, de los sindicatos mayoritarios. Prudencio advirtió de que Extremadura cuenta con 120.000 parados y de que es la novena región europea en paro femenino.