El futuro modelo de financiación acordado para la reforma del Estatuto catalán ha abierto de nuevo el debate sobre cuáles serán las autonomías más beneficiadas y las más perjudicada con este sistema. Del acuerdo del Gobierno con CiU se deriva un aumento de los porcentajes cedidos por el Estado de la recaudación por IRPF, IVA y los Impuestos Especiales (alcohol, tabaco y carburantes), lo que premiaría a aquellas comunidades autónomas más ricas y más dinámicas, como ayer reconocía en Bruselas el ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes.

Pero, ¿cómo queda Extremadura en este nuevo mapa? Según algún expertos, aquellas regiones con un menor crecimiento y cuya población está estancada o en descenso, caso de Extremadura, Galicia o Castilla y León, salen perdiendo con el acuerdo. Con el incremento en la cesión de los tributos estatales, las autonomías recibirán unos ingresos extra de unos 15.000 millones de euros, de los que a las arcas extremeñas corresponden algo más de 300 millones.

Sin embargo, para equilibrar este incremento de fondos sin poner en peligro los servicios públicos básicos, el Estado podría plantear un recorte del sistema de solidaridad , o lo que es lo mismo, el mecanismo de compensación interterritorial para facilitar un equilibrio en el crecimiento económico entre las regiones ricas y pobres. Y en ese capítulo, el Fondo de Suficiencia podría sufrir un importante recorte. En la actualidad, Extremadura recibe por este concepto algo más de 1.400 millones de euros, por lo que saldría perjudicada en el balance final del reparto. Este modelo le haría perder a la comunidad más de 1.000 millones de euros.

Este dato no es compartido del todo en la región. Fuentes de la Junta de Extremadura consultadas por este diario mantienen que el modelo final de financiación está supeditado al acuerdo que se derive del Consejo de Política Fiscal y Financiera pendiente de celebrar. En ese sentido, mantienen que no hay nada en firme sobre la supresión o recorte del Fondo de Suficiencia, una de las pocas vías que los expertos manejan para que el Estado no tuviera que aportar dinero extra para financiar el acuerdo con los convergentes catalanes.

De aplicarse esta fórmula, Economía y Hacienda baraja otras fórmulas para compensar estas posibles pérdidas, como pueden ser los fondos europeos. Para una región Objetivo 1, como es Extremadura, la única fórmula de compensación sería incrementar su participación de los Fondos de Cohesión, en los que las prioridades del reparto las establece el Gobierno. Desde la región se confía en una fórmula que garantizará la suficiencia financiera de cada autonomía.