Son las seis de la tarde y a esta hora, en el club Tu y yo todo hubiera estado preparado y a punto para comenzar a recibir a los primeros clientes. Pero hoy no es un día cualquiera ya que las puertas y ventanas están cerradas a cal y canto . Todas menos dos que tienen sus vistas a la antigua nacional 630, quizá con las persianas subidas porque tras el registro no dio tiempo a bajarlas.

El silencio reina en el entorno de este edificio de color rosado, lo que hace pensar que "algo ha debido de pasar". Lo dice un vecino que tiene una finca junto al club de alterne. Este reside en Plasencia, pero acude muchos días de la semana a sus terrenos para asistir a sus animales y le ha extrañado que "tanto el domingo como hoy lunes no haya visto nada de movimiento por aquí".

Aunque no sabe exactamente desde cuándo puede estar cerrado el club, en la zona de aparcamiento hay botellas tiradas en el suelo que denotan restos de alguna fiesta montada cualquier fin de semana.

Asegura que la zona es tranquila y que "nunca nadie ha montado ningún follón". Pero ahora este club situado entre la autovía y la antigua nacional 630 está más tranquilo que nunca, de hecho se nota "un poco" en la circulación de coches por la carretera. "No es que haya mucho trasiego por esta vía, y más con la autovía, pero es cierto que hoy he notado menos vehículos por aquí", asegura.

No sabe nada sobre las detenciones, pero esta nueva información le hace recordar que "las chicas que había dentro eran rusas", aunque nunca las ha visto. Las malas lenguas hablan incluso del buen ganado que había en este club de alterne situado en el kilómetro 493 de la antigua N-630 y que, por primera vez desde hace muchos años abierto, lleva ya varios días cerrado al público.