Ni el petróleo ni los combustibles dan un respiro a las economías domésticas. Gasolina y gasóleo se han encarecido casi un 25% en Extremadura durante los últimos 12 meses, una tendencia al alza que contrasta con la disminución de los ingresos que están sufriendo los hogares debido a la situación del mercado laboral --con cifras históricas de desempleo-- y a la política de congelación y reducción de salarios en administraciones y empresas privadas. La implantación del céntimo sanitario en la región ha contribuido ha esa gran subida, pero su efecto es limitado. Hay otros factores que están disparando el precio de los carburantes, como demuestra el hecho de que desde enero --con el céntimo sanitario ya en vigor-- hasta hoy repostar cuesta en torno a un 18% más.

El precio de los carburantes no ha parado de subir en los últimos 12 meses, y lo ha hecho con especial fuerza durante las últimas semanas. El litro de gasolina está ya en 1,43 euros por litro en prácticamente todas las estaciones de servicio, aunque en algunos casos roza ya el euro y medio, como ocurre en gasolineras como la que la compañía Shell tiene en el kilometro 630 de la A-66. Esto supone que llenar hoy el depósito del coche --en un vehículo medio-- cuesta casi 86 euros, 15 más que hace un año.

Algo similar ha ocurrido con el gasóleo. Según los datos del Ministerio de Industria, el litro de gasoil de automoción cuesta actualmente 1,37 euros de media en Extremadura, cuando en noviembre del 2010 su precio era de 1,10 euros. De esta forma, los propietarios de vehículos con motor diésel han visto como llenar el depósito se ha encarecido de 66 a 82 euros en apenas 12 meses, aunque en función de la estación de servicio esa cuantía puede variar ligeramente.

LOS MOTIVOS

Varios factores están detrás de esta trayectoria al alza en los combustibles. El céntimo sanitario, el impuesto que desde enero graba con entre 2 y 2,4 céntimos de euros el litro de carburante en Extremadura para financiar el sistema de salud, es uno de ellos. De hecho, ha servido para colocar a la región entre las tres comunidades autónomas que tienen los precios de la gasolina y el gasóleo más altos.

"La cotización del petróleo también está creciendo muchísimo", aprecia Casto Bravo, presidente de la Asociación de Estaciones de Servicio de Extremadura. Según explica, la delicada situación geopolítica que se vive en los países del norte de Africa y de Asia Occidental (dos de las mayores zonas de producción) está teniendo un efecto inflacionista sobre este producto y sus derivados, entre los que se encuentran los carburantes. "Libia, que era una de los principales proveedores de España, apenas está produciendo tras las revueltas ciudadanas que se han producido en el país", apunta.

A esto hay que añadir el interés de las petroleras por mejorar sus márgenes de beneficios y la elevada carga impositiva que tienen los combustible --entre otras cosas, un IVA del 18% que contribuye a aumentar más el precio final cuando sube el coste en origen--.

La previsión que hace el sector es que, como es habitual, los precios continúen incrementándose al menos hasta después de las fiestas navideñas. Por eso en las estaciones de servicio se muestran convencidas de que se va a superar el umbral del euro y medio por litro en las próximas semanas.