La Comisión Europea presenta hoy su propuesta para poner en marcha unos bonos europeos para financiar infraestructuras claves en los sectores de la energía, el transporte y las tecnologías de la información en la UE. En concreto, se lanzará la fase piloto, de manera que si los bonos arrojan los resultados esperados en los próximos dos años, esas emisiones se incorporarán definitivamente en el sistema de la UE para financiar infraestructuras en el periodo 2014-2020. La idea es atraer más financiación privada para grandes proyectos y respaldar aquellas obras estructuradas sobre la base de acuerdos público-privados. De esta forma se pretende mejorar la calificación de la deuda y animar la demanda de inversores institucionales tales como fondos de pensiones o aseguradoras.