La comisión parlamentaria de estudio sobre los precios agrarios echa a andar sin el PP y Ciudadanos. El órgano, a propuesta de la Junta, se constituyó ayer solo con los representantes del PSOE y Unidas por Extremadura y se da un plazo de trabajo de tres meses, un tiempo que tanto los populares como la formación naranja consideran demasiado largo teniendo en cuenta la situación que vive el campo extremeño. De esta forma, la comisión contará con diez miembros, nueve del PSOE y uno de Unidas por Extremadura. Juan Antonio González será el presidente; Maricruz Buendía la vicepresidenta y Soraya Vega la secretaria, todos socialistas.

En declaraciones a los medios antes de que comenzar la sesión, el diputado de Ciudadanos Fernando Baselga aclaró que su formación ha decidido no participar en esta comisión porque el campo no puede esperar tres meses para solucionar sus problemas. Considera además que esta medida es «absolutamente innecesaria» y frente a ella, Ciudadanos propondrá en el próximo pleno la creación de una plataforma conjunta que integre a todos los representantes del sector agrario y político con el fin de plantear soluciones inmediatas que luego sean trasladadas a Madrid y Bruselas, informa Efe.

Según Baselga, los que conocen el sector saben «perfectamente» cuáles son sus problemas y lo único que interesa al PSOE es la foto de todos los grupos constituyendo la comisión para venderla a la opinión pública.

MÁS ACCIÓN / En la misma línea, el presidente del PP extremeño, José Antonio Monago, aclaró después que la ausencia de su grupo en esta comisión se debe a que los populares no son «el burladero para hacer callar el sonido de los tractores en la calle». «Menos palabras y más acción», insistió Monago, que pidió soluciones escritas a un Gobierno socialista con mayoría en la región y a un Gobierno nacional que acaba de comenzar. El líder del PP considera que las comisiones «entretienen al personal» y solo pretenden esperar hacer callar las protestas en la calle.

«UNA ANOMALÍA» / La presidenta de la Asamblea, Blanca Martín aseguró no tener constancia «formal» de que no quisieran participar ni el PP ni Ciudadanos y consideró «una anomalía» que no hayan acudido a la sesión constitutiva. Para la presidenta del Legislativo, el respeto institucional debe estar por encima de políticas partidistas. «Si no se respetan las instituciones no se respeta la democracia y aquí conformamos la institución tal y como el pueblo extremeño ha decidido”», dijo.

Por su parte, el diputado socialista Eduardo Béjar mostró su sorpresa ante lo que considera una «falta de respeto institucional» por parte de los grupos parlamentarios que no quieren formar parte de un órgano cuyo objetivo, defendió, es arreglar un problema «tan relevante como el del campo».

Así, explicó que entre los objetivos de esta comisión de estudio figura poner en marcha un Observatorio de Precios que recoja información no solo de lo que perciben los agricultores, sino también de los costes de producción y mejorar la transparencia. «Creemos que esta comisión es un acuerdo con las organizaciones agrarias que así lo quisieron y vamos a trabajar por mejorar las condiciones de los trabajadores del campo», añadió el diputado socialista.

Por su parte, la portavoz de Unidas por Extremadura, Irene de Miguel, aseguró que la ausencia de PP y Ciudadanos es «un insulto» al campo extremeño que demuestra como las derechas de la región instrumentalizan al sector. «Cuando hay que trabajar el campo les importa un pimiento», aseguró.