La Comisión no Permanente para la Reforma del Estatuto de Autonomía de Extremadura se constituye en la Asamblea de Extremadura con la voluntad de que la negociación entre los grupos parlamentarios permita la articulación de un texto "ajustado a la realidad política, social y económica" de la región. Durante la sesión constitutiva, el presidente de la Asamblea, Juan Ramón Ferreira, destaca la disposición de la institución para trabajar en la "meta" de que el próximo Estatuto extremeño sea "nuevo, nuestro e indudablemente constitucional", tal y como ha reclamado el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, y comparte el Grupo Popular. Según informa la agencia Europa Press, Ferreira reconoce que el Parlamento debe erigirse como "protagonista" del proceso de negociación entre las fuerzas políticas pertinente para acometer dicha reforma estatutaria, con la intención además de "transmitir y contagiar el interés e ilusión" a los extremeños la "necesidad" de reformar dicho texto. Asimismo, el presidente de la Asamblea señala que el nuevo texto a su juicio "ha de dar una respuesta" a temas como los derechos sociales, institucionales y de autogobierno, las relaciones con la Unión Europea, la financiación autonómica, la problemática territorial del agua, o la nueva configuración del mundo local. Todas estas cuestiones ya han sido abordadas en otros textos estatutarios y a las que Extremadura "ha de dar una respuesta" también, basándose en los principios de que "la ciudadanía ha de ser escuchada" y de que el instrumento para ello "tiene que ser" el Parlamento. La Comisión no Permanente, que celebrará sus sesiones a partir de hoy a puerta cerrada, estará presidida por el presidente de la Cámara autonómica, Juan Ramón Ferreira, e integrada por 12 diputados, en concreto, siete socialistas (Luciano Fernández, Emilia Guijarro, Francisco Fuentes, Ignacio Sánchez Amor, Francisco Torres Gil y Estanislao Martín, además del propio Ferreira), así como cinco populares (Carlos Floriano, Pilar Vargas, Cristina Teniente, Laureano León y Tomás Martín Tamayo). En la sesión de hoy, la portavoz del Grupo Popular, Pilar Vargas, tras manifestar que su partido es "consciente" de que "no es la prioridad de los extremeños" la modificación del Estatuto, muestra la "voluntad de diálogo" del PP en la tarea de reforma del texto actual porque, a su juicio, "queremos que el Estatuto canalice la solución a los verdaderos problemas de todos los extremeños". Por su parte, el portavoz del Grupo Socialista, Ignacio Sánchez Amor, indica la "voluntad firme de acuerdo con el PP para tener un estatuto que refleja la nueva Extremadura desde el punto de vista más impulsivo posible". Sánchez Amor defiende que la discusión sobre el nuevo Estatuto "no se debe convertir en un elemento esencial de debate de la vida diaria de los ciudadanos" ya que, según recuerda, "en otras comunidades autónomas se generó un exceso de atención política, institucional y mediática que luego no se ha correspondido con el interés de los ciudadanos en las urnas". Aboga que la reforma del Estatuto "puede ser importante para las instituciones y sin duda lo será para el futuro de Extremadura, pero no pretendemos convertir esa discusión política en la discusión del día a día con la que tener pendientes a los extremeños".