La comunidad musulmana extremeña celebrará este año de forma "discreta" la Fiesta del Sacrificio, que tendrá lugar el próximo viernes, debido a las circunstancias marcadas por la actual pandemia y, entre otros aspectos, se evitarán las aglomeraciones en el rezo.

El máximo responsable de la Comisión Islámica en Extremadura, Adel Najjar, ha explicado a Efe que la celebración se vivirá este año con la "responsabilidad" que exige el actual momento y las normas vigentes.

En este sentido, el rezo que se lleve a cabo en las mezquitas se efectuará de igual forma que los realizados hasta ahora desde que reabrieron los templos tras el estado de alarma, con las normas de aforo, distancias y sanitarias instauradas.

En el caso de Badajoz se estudia, por ejemplo, el establecimiento de dos turnos, como está siendo habitual ahora los viernes en la mezquita pacense, para evitar las aglomeraciones.

Y es que evitar la confluencia masiva de personas en el rezo es una de las principales premisas marcadas en el entorno de esta celebración, cuestión que se ha abordado además con la Junta de Extremadura.

En otros territorios donde hay importantes rezos colectivos en espacios abiertos, como la Región de Murcia, han decidido suspender estas celebraciones.

Cerca de 20.000 musulmanes extremeños llevan a cabo esta celebración, aunque este año "de forma tan distinta a como se ha efectuado otros ejercicios".

A este respecto, ha indicado que son muchos los ciudadanos que han preguntado cómo se llevarán a cabo este año los rezos y en qué circunstancias, y han expresado todas sus dudas al respecto.

La comunidad islámica extremeña ha incidido además en la importancia de mantener las medidas de seguridad actuales durante toda la festividad.

En un contexto como el actual de crisis sanitaria, se han tenido que tomar también otras medidas como suprimir la ayuda de donación del cordero a las personas con más dificultades.