Cáceres Hace dos semanas Cheta, la podenca de 10 años que aparece en la foto, fue raptada cuando paseaba por Cáceres con su dueña, María. Un desconocido la cogió y se la llevó corriendo a su casa. María, con la ayuda ciudadana y guiada por los ladridos de la perra logró dar con el lugar donde la tenían oculta y recuperarla. "Con el chip creo que este tipo de robos será más difícil. El dispositivo permite a la policía y los veterinarios conocer quién es realmente su dueño", apunta María.