Cuando ocurrió el terrible crimen, el alcalde de Villafranca de los Barros, Ramón Ropero, estaba de vacaciones y decidió regresar a la localidad. Hoy está previsto un pleno extraordinario a las once de la mañana y, minutos antes, tendrá lugar una concentración a las puertas del ayuntamiento, que decretará tres días de luto. El funeral será a las 19.00 horas.

Tras los hechos, se sucedieron las muestras de repulsa y las condenas públicas. Como hiciera el delegado del Gobierno, también el consejero de Política Social, Luis Alfonso Hernández Carrón, se desplazó a la localidad para trasladar el pésame a la familia de la víctima, que estaba siendo atendida por la Oficina de Igualdad y Violencia de Género de Tierra de Barros. También el PSOE regional, provincial y local condenó esta muerte y pidió mayores esfuerzos contra "esta lacra social".

El asesinato de Catalina eleva a 30 el número de víctimas mortales registradas en el ámbito nacional en el 2013 y es el único fallecimiento por violencia de género en lo que va de año en Extremadura, donde el último ocurrió en Zafra en enero del año pasado.