El fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, resalta la profesionalidad y humanidad del fiscal superior de Extremadura, Aurelio Blanco, además de destacar su "delicadeza, sensibilidad y mano izquierda" para desempeñar el cargo bajo los principios "inquebrantables" de cumplimiento de la ley y servicio a la ciudadanía.

Según recoge la agencia Efe, así se expresa Conde-Pumpido durante la imposición a Blanco de la Cruz de Honor de San Raimundo de Peñafort, un galardón que otorga el Ministerio de Justicia para distinguir la trayectoria profesional y méritos de una persona.

El fiscal general del Estado recuerda que esta distinción es un reconocimiento a la labor desarrollada, "que muchas veces llega tarde, no en este caso", y aclara que Blanco es una figura "admirable", uno de los fiscales que más hay trabajado por la modernización de la justicia.

Además, indica que el fiscal extremeño se encuentra en un momento "de plenitud" en su carrera y que su forma de proceder "propicia que cunda el ejemplo, con una trayectoria en la fiscalía de 27 años, avalada por todo tipo de éxitos". "Aurelio es fiscal, pero también juez y secretario judicial, y él sabrá por qué optó por el Ministerio Fiscal, aunque yo sí lo sé, por su vocación, sin olvidar que es difícil ser fiscal y al mismo tiempo jefe, y él reúne a la perfección esas dos situaciones".

Blanco destaca que para él hoy es un día "muy importante", no sólo por la imposición de la Cruz de Honor de San Raimundo de Peñafort, sino porque hoy hace 11 años que Naciones Unidas proclamó esta jornada como Día Internacional contra la Violencia de Género, "una cuestión en la que todos trabajamos por su erradicación".

El fiscal superior de Extremadura apostilla que con este galardón no se premia una carrera individual, "sino el trabajo de un colectivo, el de los fiscales de Cáceres y Badajoz".