La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Huelva ha condenado, tras llegar las partes a un consenso, a 16 años de cárcel y al pago de 120.000 euros a un hombre acusado de cometer delitos de estafa y falsificación de documentos entre 2001 y 2002, con los que estafó 70.000 euros a bancos y cajas, una de ellas de Badajoz.

No obstante, por el artículo 76 del Código Penal, sólo cumplirá siete años y seis meses de condena porque la pena mayor impuesta por uno de los delitos es de dos años y seis meses y el límite no puede triplicar este periodo.

Según ha explicado el letrado del acusado, Luis Manuel Núñez, se ha llegado a un consenso y el Ministerio Fiscal ha reducido la pena de 38 a 16 años, a lo que ha añadido que sólo cumplirá siete años por los beneficios del artículo 76 del Código Penal.

En esta línea, ha matizado que este artículo era "con lo único que podían jugar, ya que las pruebas eran irrefutables". El individuo consiguió estafar más de 70.000 euros de varios bancos y cajas de ahorro y no pagar los servicios de un hotel, de una gasolinera y de un supermercado.

Según el escrito de acusación de la Fiscalía, al que ha tenido acceso Europa Press, el acusado, de 56 años y con antecedentes penales por delitos de falsificación documental y estafa, cometió más de 20 delitos entre 2001 y 2002 en varios puntos de la geografía española como Aracena (Huelva), Badajoz, Malpica del Tajo (Toledo) y Gerena (Sevilla), entre otras localidades.

La Fiscalía ha pedido para este individuo más de 38 años de cárcel y el pago de más de 120.000 euros. De esta cantidad, más de 45.000 euros son en concepto de multa por los delitos cometidos, mientras que el resto, unos 71.000 euros, serán destinados al pago de indemnizaciones a los negocios afectados, no obstante, el letrado ha confirmado que su cliente es insolvente.

Los hechos se remontan al 31 de enero de 2001, cuando el acusado se personó en una sucursal bancaria de Aracena, en la que "haciéndose pasar por el sustituto del director de otro banco", solicitó y obtuvo la cantidad de 12.000 euros, mediante la entrega de un impreso original de abono interbancario, a sabiendas de su inautenticidad.

El 13 de junio de 2001, el acusado contrató la concesión de un préstamo, presentando una nómina falsa, con el que adquirió un vehículo sin pagar ninguna mensualidad.

En los meses de agosto y septiembre logró estafar a dos sucursales bancarias de la provincia de Cáceres la cantidad de 12.000 euros, haciéndose pasar por empleado de otro banco, al igual que lo hizo un mes después en Malpica del Tajo (Toledo). Del mismo modo, el 17 de diciembre de ese mismo año, en otra sucursal de Badajoz el acusado extrajo 9.000 euros, entregando un impreso falso de otro banco.

Por otro lado, desde el 21 de enero hasta el 3 de febrero de 2002, el presunto estafador se alojó en un hotel en Aravaca (Madrid), donde no abonó los correspondientes gastos de alojamiento, al presentar un DNI falso. Del mismo modo, adquirió cuatro ordenadores portátiles y una impresora en un supermercado de Plasencia, por un valor de 8.211 euros, entregando al abonar la compra un cheque bancario falso y estafó 166 euros en una estación de servicios.

Tras un par de estafas más en Cáceres y en la localidad sevillana de Gerena, fue detenido el 12 de noviembre de 2002 y estuvo en prisión provisional hasta el 11 de febrero de 2003. Desde el 6 de febrero de ese mismo año fue trasladado con categoría de penado --por otras causas-- al centro penitenciario de Alhaurín de la Torre.