La Asociación Cacereña de Apicultores ha condenado la «masacre» de colmenas de dos apicultores de Cáceres y Salamanca durante la trashumancia, un nuevo ejemplo de los ‘ataques’ sufridos en los últimos años. El apicultor cacereño ha sufrido el ataque de 203 colmenas ubicadas en Robleda-Cervantes (Zamora), cuyas abejas han sido asfixiadas con el cierre intencionado de las piqueras que permiten su salida.