Tras quince días en huelga, los 57 trabajadores de la compañía Líneas Extremeñas de Autobuses (Leda) realizan desde hoy su servicio habitual. Vuelven al trabajo después de que hayan logrado alcanzar un acuerdo con la empresa: se retiran los expedientes sancionadores abiertos a los 24 trabajadores que el primer día no realizaron las rutas de transporte escolar y ya se han abonado todas las nóminas pendientes (las correspondientes a los meses de marzo, abril más la extra) excepto la del mes de mayo, que se han comprometido a abonarla en los próximos días. Así lo confirmó ayer el presidente del comité de empresa, José Luis García, que ha mediado entre las partes para alcanzar un consenso. Reitera que «seguimos pidiendo disculpas por las molestias ocasionadas en estos quince días» y agradece las «numerosas muestras de apoyo de la gente».

De esta forma el conflicto en la línea de autobuses, que se agravó tras fracasar la mediación, se «sosiega» y todos los servicios vuelven a funcionar desde hoy en sus horarios habituales, tal y como aseguró ayer la empresa a través de sus redes sociales. Tras esto, el consejero delegado de Leda, José Emilio Cruz, precisó que la retirada de los expedientes sancionadores está condicionada a que la Junta no exija responsabilidades a la empresa por el incumplimiento de los servicios minímo.

No obstante, la incertidumbre sigue en el aire. El próximo lunes está pendiente que se reúna la mesa para resolver el proceso de adjudicación de dos de los 44 lotes del nuevo contrato de las rutas regulares de transportes en la comunidad, a los que Leda opta de nuevo. De hecho, estaba previsto que la adjudicación de esos dos lotes se resolviera el pasado martes, pero un empate técnico en un caso y un error en la documentación de Leda en el otro, obligó a la Consejería de Medio Ambiente a suspender la mesa para solicitar más información.

En este sentido, según explicó a Efe José Emilio Curz, la empresa ha acordado acudir con el comité «de la mano» a la Dirección General de Transportes para reclamar el abono de la parte proporcional del servicio correspondiente a este año, dado que las operadoras adjudicatarias de este nuevo concurso van a iniciar la prestación del servicio bien entrado el año.Por ello, pedirán que de un coste anual cifrado en 690.000 euros, la Junta abone la «parte proporcional» a Leda por el tiempo que ha seguido prestando el servicio durante este año. En caso de que la empresa no resulte adjudicataria, Cruz defiende que seguirá siendo «viable» dado que tiene otras líneas de negocio, como es el transporte escolar o las líneas interregionales.