El PP y el PSOE se acusan mutuamente de ser los responsables del conflicto interno abierto por la presidencia de Acorex. El líder de los socialistas, Guillermo Fernández Vara, asegura que ni él ni el su partido se han "entrometido" en la crisis que atraviesa Acorex. El portavoz del Grupo Socialista en la Asamblea, Valentín García, afirma que la situación que atraviesa el grupo es responsabilidad del presidente de la Junta, José Antonio Monago, y del diputado de IU Alejandro Nogales, a quienes acusa de intervenir en el conflicto y de poner y quitar presidentes, "todos del mismo color político".

La portavoz del PP, Francisca Rosa, recuerda que Acorex estaba en quiebra y que tras la elaboración de un plan de viabilidad, el Gobierno regional le inyectó 10 millones de euros para que cumpliera la función de estar al servicio de Extremadura. Rosa acusa a los socialistas de estar detrás del nombramiento ilegal y lamenta que, como ya es habitual, traten de "dividir y embarrar" todo lo que es bueno para la región. El portavoz del PP en la Asamblea, Miguel Cantero, pide a Vara que deje de "mangonear" para que la sociedad no acabe como las cajas de ahorro extremeñas.

El portavoz de IU, Pedro Escobar, indica que poco a poco se cae "el mito" de Acorex, donde hay una base muy amplia de cooperativistas que cobran entre 800 y 1.200 euros y una élite con nóminas superiores a las del presidente del Gobierno. Escobar considera que la crisis se debe a que una minoría están defendiendo sus intereses ante un proceso de cambio. Critica que los partidos mayoritarios traten de intervenir en las cooperativas y que trasladen ahí "el campo de batalla", porque esto supone "poner una bomba de relojería debajo de su estructura". Por su parte, el portavoz del Prex-Crex, Damián Beneyto, aboga por dejar a Acorex resolver sus problemas ya que las injerencias políticas solo perjudican.

Sobre el conflicto de Acorex también se han pronunciado organizaciones agrarias como UPA-UCE y Apag Extremadura Asaja, que miran la situación con preocupación y piden a la Junta que no deje caer el grupo y si es necesario, que intervenga.