El Consejo Regional de Caza examinó ayer las alegaciones y sugerencias que los distintos representantes del sector han presentado al texto de la futura Ley de Caza de Extremadura y ha dado el visto bueno al borrador de la nueva ley.
Esta reunión culmina una etapa de información y participación con el sector y representantes del ámbito empresarial, cazadores, ganaderos y agricultores, que han aportado 440 propuestas. Superado el proceso administrativo, se iniciará la tramitación en la Asamblea, prevista para finales de año.
El director general del Medio Natural, Guillermo Crespo, mostró su satisfacción por este resultado y la del consejo en su totalidad por el texto final que "corrobora el concepto social de la caza y mejora en agilidad y gestión", apuntó la Junta en un comunicado. "Tanto la parte social como la empresarial ven reflejados sus intereses en el texto", afirma el director.
En esta línea, el diputado del PSOE José Luis Viñuela también destacó ayer el componente social de la ley, la cual permitirá alcanzar a más cazadores, ya que, explicó, "se ampliarán los terrenos cinegéticos".
Entre las aportaciones, el director general destacó que las "autorizaciones" desaparecen a favor de las notificaciones, una medida que dará mayor "agilidad a la actividad". Asimismo, se han admitido las alegaciones referentes al concepto de calidad en la caza, que pasa a ser gestionada por una certificadora externa y acreditada.
A partir de ahora, el texto será remitido al Consejo de Gobierno, tras la revisión por el Consejo Económico Social y el Consejo Consultivo, y después a la Asamblea para su debate y aprobación definitiva.
