«Los datos son la verdad absoluta del periodismo». Lo sabe muy bien Sergio Parra Cruz (Badajoz, 21 de abril de 1997) que se ha hecho viral durante la pandemia por los mapas en los que analizaba a diario las cifras del coronavirus en la región. Graduado en Comunicación Audiovisual por la Universidad de Extremadura, cuenta con un máster en Periodismo Multimedia en la Universidad de Valencia. Trabaja en la UEx, colabora en Canal Extremadura Radio y en septiembre se estrenó en Canal Extremadura Televisión. Confiesa que barajar estos números ha sido un hueso duro de roer porque detrás de ellos hay cientos de vidas.

-La pregunta que todos hacemos al comenzar a charlar con alguien: ¿cómo estás?

-Bien, pero preocupado por todo esto, como nos pasa a todos. Actualmente me encuentro administrando mi tiempo y mi energía.

-Además, tiene trabajo en los tiempos que corren.

-Que una persona consiga trabajo en medio de una pandemia, como es mi caso, me sigue sorprendiendo. Jamás imaginé que esto me fuera a ayudar tanto.

-¿De dónde viene su afición por el periodismo de datos y el uso de los números?

-Comenzó hace bastante tiempo. Durante la carrera me empezó a llamar la atención la desinformación, los bulos, las redes sociales, todas las fake news... Y gran parte de cómo se verifica una noticia falsa recae en el periodismo de datos, que es una disciplina que para mí es la verdad absoluta del periodismo. Luego se pueden interpretar, opinar, valorar como quieras, pero un dato tiene que ser verdadero o falso, siempre es blanco o negro. Luego, con el tema del confinamiento y durante el máster tuve asignaturas de periodismo de investigación, comencé a meterme en este mundo y hoy por hoy lo utilizo un montón, y no solo para el covid, que eso es lo bueno.

-¿Cuál fue el peor día para Extremadura?

-Recuerdo días en los que llegábamos a 30 fallecidos en la región. Y contar muertes es muy triste. Tenía la sensación de que a todos esos fallecidos los conocía. Era lo que nos unía a todos. Y cuando hacía los mapas, cada fallecimiento me costaba una barbaridad.

-¿Cómo hace los mapas?

-Cada tarde, cuando recibimos la nota de prensa de la Junta, le dedico en torno a una hora. Utilizo desde una base de datos en Excel hasta un programa de diseño, y voy analizando los números, desde los más generales hasta los más específicos. Con la base de datos verifico que todas las sumas son correctas y luego lo comparto en redes sociales. Si no cuadran, llamo a la Junta, pregunto qué es lo que falla, y vuelvo a empezar. Ese sería el proceso a gran escala.

-¿Qué hay más allá de las cifras?

-Personas con su vida, con familia, con amigos, con una situación inesperada como es un virus, con gente que vive en residencias o que tienen sus trabajos... Las cifras son frías y cuando decimos que hay 50 altas convendría explicar que hay 50 personas que se han dado de alta, que han superado el virus. Cuando hablamos de fallecimientos, también hay que anunciar que hay una persona que ha perdido la vida por culpa de la pandemia.

-¿Qué es lo que más le ha sorprendido, para bien o para mal, del papel que han jugado los políticos extremeños durante estos meses?

-No sé si habría algo bueno, sería muy difícil interpretarlo, porque creo que la sociedad le ha dado una buena bofetada a los políticos, les ha recordado que nosotros somos la base de un país. Cuando estamos en medio de una epidemia en la que hemos perdido vidas, hemos perdido empleo, hemos perdido amigos, familiares, me parece un poco indignante el papel de los políticos. Lo que sí he aprendido es que la ciudadanía sabe afrontar mejor esta situación que los que nos controlan.

-¿Cómo pronostica el futuro?

-Lo pronostico como dicen los científicos. Quiero exponer que yo soy periodista, puedo analizar el dato, la tendencia, pero si un científico que lleva trabajando en un laboratorio tantas horas y por un sueldo insuficiente para buscar una solución, un medicamento que ayude a parar esto, asegura que va para largo y que va a durar uno o dos años, hay que hacerles caso. Mientras apoyemos a los expertos, la tendencia podría mejorar, aunque las cifras en este último mes de septiembre han sido duras.