El plan de Acorex para intentar evitar su liquidación puede seguir adelante. Las 23 cooperativas que ayer acudieron a la asamblea general para valorar la continuidad del proceso votaron a favor de que el grupo extremeño prosiga con la propuesta de convenio para intentar salvar a Acorex, aunque no todas quieren seguir ligadas al grupo. De las 23 presentes ayer, diez dieron el visto bueno a la propuesta de convenio pero decidieron optar por desligarse eligiendo la opción que permite a las que tienen deudas pendientes -Acorex debe a varias cooperativas unos 10 millones de euros- cobrar sólo el 15% del capital adeudado. Mientras, la opción elegida mayoritariamente ayer por 13 de las cooperativas y otras que no pudieron asistir -unas 15 en total, según el presidente de la Acorex-, es seguir en la agrupación (lo que posibilita continuar con el proceso) eligiendo la cuarta opción ofrecida. En este caso, aquellas con las que se tengan deudas cobrarán en tres años el 25% de la cantidad adeuda y el 75% restante pasará a formar parte del capital social de la nueva Acorex si logra salvar el concurso de acreedores. «Esto supondrá un cambio importante contablemente porque permitirá sanear sus cuentas y esa deuda contabilizada como pérdida pasará a ser inversión financiera», señala Manuel Ortega.

Tras este paso inicial, clave para poder seguir con el proceso, los gestores de Acorex comenzarán a reunirse en los próximos días con los acreedores que no son cooperativas: grandes empresas y entidades bancarias, además de Avante -con la que ya se da por hecho un posible acuerdo para convertir su deuda en préstamo-. A estos acreedores se les ofrecerán tres de las cuatro opciones votadas ayer en la asamblea general de las cooperativas: una quita del 95% o del 85% o una tercera opción que no tiene quita pero tras diez años la deuda se convertiría en un préstamo subordinado.

De lo que digan estos acreedores dependerá el futuro de Acorex que se ratificará en el juzgado de lo mercantil el 11 de enero. La agrupación necesita que el 65% de los acreedores -cada uno supone un porcentaje distinto en función de su deuda- acepte su plan para evitar la liquidación definitiva. Ortega confía en poder convencer ahora a los bancos principalmente: «sería lo mejor, con la liquidación todos perdemos». Si Acorex logra el convenio pasaría a convertirse en socia de la cooperativa andaluza Dcoop y llegado ese punto el nuevo grupo necesitaría reformar sus estatutos y su Consejo Rector.