Extremadura registró en el 2012, después de Canarias, los costes laborales más bajos de España, 25.685,01 euros netos por trabajador y año, lo que supone un descenso del 1,8 por ciento respecto al año anterior.

El coste neto a nivel nacional fue de 30.667,43 euros anuales por trabajador, un 0,7 por ciento menos que en 2011, según la Encuesta de Coste Laboral publicada hoy por el Instituto Nacional de Estadística.

La variación respecto a 2011 del coste laboral neto fue negativa en todas las comunidades, excepto en País Vasco, Comunidad de Madrid y Castilla-La Mancha.

Extremadura fue la región que recibió las mayores subvenciones y deducciones fiscales vinculadas al empleo y a la formación profesional, 321,60 euros por trabajador y año; la segunda con los salarios más bajos, 19.084,15 euros; y la última en beneficios sociales, 305,61 euros.

El coste salarial se ha reducido en Extremadura un 2 por ciento y el no salarial un 1,2 hasta, en este caso, los 6.600,86 euros por trabajador y año.