Pensiones, medidas anticrisis, control del déficit público o desempleo. La sombra de la crisis económica sigue planeando sobre la Asamblea de Extremadura, cuyos debates parlamentarios, aun en el día de resaca de la huelga general --que ni siquiera se llegó a mencionar ayer--, volvieron a centrarse en ella. Nuevos debates, aunque sobre los mismos temas de los últimos meses, y también nuevos enfrentamientos entre gobierno y oposición, pero no tan duros como en otras ocasiones.

Las pensiones fueron el primer punto: el líder de la oposición, José Antonio Monago, preguntó al presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, sobre "la congelación" de estas en la región en el 2011. Congelación que no existe según Vara, que afirmó que "el 100% de las pensiones extremeñas se actualizarán el año próximo y que el 60% --mínimas y no contributivas-- se incrementarán el 1%".

El enfrentamiento continuó con el balance de las medidas anticrisis aplicadas por el Ejecutivo regional. En ese sentido, Vara destacó que "aunque tiene hematomas y cicatrices, si tuviera que volver atrás, tomaría las mismas medidas". Unas medidas cuyos resultados "no se pueden comparar con nada" porque no ha habido nada como esta crisis. Para Monago sin embargo, el balance es claro: "de 88.000 parados en el 2008, se ha pasado a 114.000 en la actualidad".

El debate continuó después su tónica general --se aprobó la Ley del Suelo y Ordenación Territorial y la de barrios y el Consejo de la Juventud de Extremadura iniciaron su trámite parlamentario-- para volver más tarde a retomar el tema de las finanzas. En este caso, fue el consejero de Administración Pública y Hacienda, Angel Franco, quien, para defenderse de las críticas de la diputada popular Cristina Teniente --que afirmó que "el Gobierno prometió austeridad pero no puede pagar lo que gasta"-- consoló a los diputados diciendo que la región "sin estar para tirar cohetes, presenta indicadores muchísimo mejores que la media de las comunidades".