Las víctimas del terrorismo en la región se encuentran divididas a causa de la labor de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) a nivel nacional. Por eso, ayer se dio a conocer la Federación Autonómica de Víctimas del Terrorismo de Extremadura, que presentó sus proyectos al presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, y que preside provisionalmente Manuela Orantos, expresidenta de la AVT extremeña. Los representantes de este nuevo organismo reiteraron que se han adherido a la federación nacional, y que cuentan por el momento con 35 de las 55 víctimas del terrorismo en la comunidad autónoma.

Orantos indicó que se han federado y unido a la federación nacional porque "la Asociación de Víctimas del Terrorismo está politizada y la federación nace con el objetivo de recuperar el espíritu de antes, cuando la AVT era una asociación apolítica".

Este argumento ha sido negado por la presidenta actual de este colectivo en la región, Isabel Chamizo, que defiende el trabajo de la AVT en España y el de su presidente, Francisco José Alcaraz, y argumenta que lo único que persigue esa federación es "dividir a las víctimas, cuando aquí estamos muy unidos y luchando por y para las víctimas del terrorismo".

Sin embargo, el secretario de esta federación en Extremadura, Antonio Felipe Gómez, reiteró la oposición a la labor de la AVT y, sobre todo, a la de Alcaraz, que ha conseguido, dijo, que la asociación esté "casi como un apéndice de un partido que todos conocemos", en referencia al Partido Popular. Se trata, insistió, de "tener una desvinculación total de la política que está llevando a cabo hasta ahora el presidente de la Asociación de Víctimas del Terrorismo".

La Federación de Asociaciones Autonómicas de Víctimas del Terrorismo, que está trabajando ya en Andalucía, Cataluña, Galicia y Comunidad Valenciana, se constituyó en noviembre del pasado año en Granada con el objetivo crear un nuevo organismo de asistencia a las víctimas y que estuviera fuera del "uso político" que a su juicio hace de la AVT su presidente.

PROCESO DE PAZ Además de esta argumentación sobre el nacimiento de la federación, su portavoz, Santiago Moriche, explicó que entre los objetivos de la misma está intercambiar opiniones con las asociaciones que pertenezcan a la federación y trabajar conjuntamente por la defensa de las víctimas resaltando que están "alejados de cualquier inclinación política".

Asimismo, comentó que han comunicado a Rodríguez Ibarra la necesidad de lograr ayudas para "haberes pasivos, prótesis o pensiones", y cuestiones como las condecoraciones a las víctimas en la región.

Según Moriche, la Junta será la principal "fuente de financiación" de su colectivo hasta que se ponga en marcha un gabinete que se dedique "expresamente" a atender las necesidades de las víctimas.

Por otro lado, los dirigentes de la federación se mostraron en contra de la negociación del Gobierno con ETA, ya que para iniciar un proceso así creen fundamental que primero los etarras "cumplan las condenas y pidan perdón".