El sindicato CSIF Extremadura, el de mayor representación entre los empleados públicos, se mostró ayer "tremendamente sorprendido" por el anuncio en la Asamblea de este modelo de evaluación. El enfado de su presidente, José Fernández Vidal, es mayúsculo porque entienden que la cuestión requiere de un consenso previo. "No es de recibo que se presente un proyecto que desconocen por completo los sindicatos", lamentó, al tiempo que reclama la negociación de los criterios.
El sindicato apoya que se evalúe el rendimiento de los trabajadores pero "conforme a unos criterios consensuados", especialmente "quién, cuándo y cómo" se hará esa evaluación. Además, consideran que la posible repercusión en las retribuciones complementarias debe ser acorde al complemento de carrera profesional, destinado a retribuir el nivel alcanzado.
Vidal explicó que una evaluación negativa del desempeño podría suponer la pérdida de nivel y disminución de las retribuciones complementarias. "Lo que no vamos a tolerar es que se haga la productividad a dedo como hace la administración central" y recordó que la obligatoriedad de la propuesta para todos los trabajadores contradice al Estatuto.
