Si le pidiéramos a tu abuelo que definiese inteligencia incluiría conceptos asociados a la rapidez para resolver cálculos o a la capacidad para retener conceptos. También propondría la capacidad de razonamiento. Pero me interesan los dos primeros porque en esos dos conceptos, y en algunos otros, las máquinas nos han superado. Como somos listos, redefinimos inteligencia en función de nuestros intereses y hoy precisión, memoria o rapidez no tienen tanto peso en la definición como en la época de tu abuelo.

Ya no son cualidades únicas de nuestra especie, aunque todavía hoy hay empresas que en sus pruebas de acceso realizan "test para medir tu inteligencia". Por cierto, en esas pruebas un robot lo haría mucho mejor que tú y que yo.

Asimov , en su libro Circulo Vicioso , escribió las primeras reglas de la robótica. Nos decía que un robot no puede hacer daño a un ser humano y debe obedecer las órdenes que le den los seres humanos. Si tenemos que escribir estas cosas es porque se prevé que esto ocurra.

En Seúl, el ministro de Comercio, Industria y Energía ha dicho que "el Gobierno definirá principios éticos relativos al papel y a las funciones que desempeñan en la actualidad los robots, ya que en el futuro irán adquiriendo tareas que impliquen una inteligencia mayor".

¿Y qué dicen los filósofos? Han creado una corriente, a la que se están apuntando pensadores de mucho prestigio, el posthumanismo. Algunos hablan del fin del hombre, otros del fin del universo centrado en el hombre.

Me imagino a los Neardentales tratando de detener el avance de una especie superior, los Cromañón. No lo consiguieron. Siempre la especie capaz de adaptarse mejor al medio ha sobrevivido. ¿Seguiremos así?

Y tú, ¿recuerdas cuando te dijeron que te querían, pero solo como amigo?