La Delegación del Gobierno en Extremadura anunció ayer por la tarde que "no consentirá ni permitirá concentraciones sin comunicación previa en tiempo y forma, según establece la ley". La decisión se produjo horas después de que la Subdelegación del Gobierno en Cáceres tuviera conocimiento a través de EL PERIODICO de que se estaba convocando a través de internet una concentración de radicales de ultraizquierda para esta tarde en la capital cacereña.

En el comunicado, afirmó que "desde el Gobierno de España se hace un llamamiento a todos para que reine la calma y la tranquilidad, y que las diferencias se solucionen con el diálogo, dentro de las reglas democráticas en las que no tiene cabida la violencia".

Fernando Solís, subdelegado del Gobierno en Cáceres, aseguró que se mantendrá el dispositivo especial de vigilancia en zonas de copas frecuentadas por radicales para prevenir altercados. "No permitiremos ninguna alteración más del orden público", dijo con rotundidad. Anoche la Policía Nacional realizó labores de vigilancia e identificación en la plaza Mayor, sin que al cierre de esta edición hubiera habido incidentes. Cuatro y CNN+ desplazaron también unidades móviles ante la convocatoria de una manifestación de radicales de extrema derecha por SMS.