Las denuncias por acoso en el trabajo (tanto de hombres como de mujeres) se han disparado en la región en los seis primeros meses de este año. Tan solo entre enero y junio se han registrado en Extremadura prácticamente los mismos casos que en todo el 2006, una situación que el sindicato UGT Extremadura relaciona con el aumento de denuncias de acoso sexual por la entrada en vigor de la Ley de Igualdad.

Así lo explica su responsable de Igualdad, Marisa Alvarez, quien destaca que "el acoso laboral no es un fenómeno nuevo, sino que está empezando a aflorar más ahora". A su juicio, el incremento está vinculado a la puesta en marcha de la Ley de Igualdad, que define exactamente en qué consiste el acoso sexual en el trabajo (una categoría de acoso laboral). "Además, esta normativa ha contribuido a que la gente esté más concienciada de este problema y exista un mayor rechazo hacia el mismo", apunta.

Concretamente, en este primer semestre se han registrado en la comunidad 26 denuncias por supuesto acoso laboral --dentro de las cuales se incluirían posibles casos de acoso sexual en el trabajo--, mientras que el año anterior se registraron 29 en total. Es decir, en solo medio año ya hay prácticamente el mismo número de casos que en los 12 meses del 2006.

El incremento, aunque más leve, se repite a nivel nacional. Hasta el momento, de acuerdo con los datos del Ministerio de Trabajo, se han registrado 1.097 denuncias por este tipo de situaciones, lo que supone superar ostensiblemente la mitad de las contabilizadas en toda España durante el 2006, cuando se registraron 1.756.

DISCRIMINACION SEXUAL Asimismo, también se ha producido un aumento de las denuncias por discriminación sexual --supuesto que también recoge la Ley de Igualdad-- en Extremadura. Ya se han registrado tres, mientras que durante todo el año pasado se contabilizaron cuatro. A nivel nacional, son 108 los casos en el primer semestre y 187 los recibidos en todo el 2006. Para Alvarez, "son los propios trabajadores quienes se van concienciando de qué deben defender sus derechos. Ahora es necesario es facilitarles esta labor".

En este sentido, la responsable de Igualdad apunta que desde UGT ya se están planteando la necesidad de mejorar los mecanismos de defensa de las víctimas del acoso sexual y la discriminación por razón de sexo. "Existe una laguna en este ámbito, ya que hasta ahora se ha incidido más en el tema de la violencia doméstica. Por eso, vamos a solicitar a la Junta de Extremadura la creación de un convenio específico para abordar este problema. Hasta ahora, solo Andalucía cuenta con una herramienta así y lo cierto es que está dando muy buenos resultados", explica Alvarez.

Según el Ministerio, las actuaciones en materia de discriminación sexual tienen carácter prioritario, por lo que los inspectores de Trabajo están obligados a iniciar las actuaciones dentro de las 24 horas siguientes a la entrada de la denuncia. Además, se ha tomado una medida para mejorar la atención a este tipo de casos: en las direcciones provinciales con más de 20 inspectores se ha destinado al menos uno hacerse cargo de este tipo de actuaciones. Para ello se les ha dotado de formación para especializarles en esta materia.

Estas intervenciones se pueden resolver de dos formas: en casos leves y cuando no existe perjuicio directo para la víctima simplemente se realiza un requerimiento para subsanar la situación, mientras que si se trata de una denuncia grave tipificada en la ley de Orden Social se pone el caso en manos de los tribunales. Además, con la entrada en vigor de la Ley de Igualdad, los inspectores pueden iniciar el procedimiento judicial de oficio ante un juzgado de lo Social.