Las denuncias por violencia de género durante los tres primeros meses del año ascendieron a un total de 262 en Extremadura, lo que supone un incremento del 6% con respecto al mismo período del año anterior, el 2012. Además, en el primer trimestre de 2013, se contabilizaron 1.531 mujeres con orden de alejamiento en vigor, lo que supone un 2% menos que en el mismo período del año anterior.

Estos datos se dieron a conocer ayer por la responsable de la Unidad de Violencia Contra la Mujer de la Delegación de la Subdelegación del Gobierno de Badajoz, Milagrosa Ortega, durante un encuentro en el que participaron también la directora de la Casa de la Mujer de Badajoz, Dolores Vázquez Rafael, personal del Instituto de la Mujer de Extremadura, técnicos del Sexpe, representantes de la Policía Local, la Guardia Civil y la Policía Nacional, así como representantes de diversas asociaciones.

Según los especialistas, que aumenten los casos de denuncias es importante en cuanto se pretende que "todos los casos salgan a la luz" para poder así conocer la "magnitud del fenómeno", aunque lógicamente se busca que desciendan en el futuro. Estas cifras comparadas con el resto de comunidades, apuntan a que la "incidencia es baja", una tendencia habitual en Extremadura, que siempre está en los últimos puestos en cuanto al número de denuncias por habitantes, pero un solo caso ya es "intolerable".