Las denuncias presentadas en Extremadura por casos de violencia contra las mujeres mantiene el ritmo al alza de los últimos años, de tal forma que en los tres primeros meses del 2008 se han registrado en los juzgados extremeños 238 nuevas querellas, lo que supone un incremento del 16% con respecto al mismo periodo del año anterior, en que se registraron algo más de 200. Además, entre el 1 de enero y el 31 de marzo, los jueces dictaron 157 nuevas órdenes de protección para mujeres de la comunidad.
También han crecido en la región las detenciones de presuntos autores de delitos de malos tratos, en concreto un 5,71%, hasta alcanzar una cifra de 185 personas en los tres primeros meses del año, según informó la delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira.
Desde el año 2004, la Ley de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género garantiza a las víctimas de la violencia machista la protección de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. En Extremadura, este servicio lo reciben actualmente un total 1.065 mujeres, a quienes un juez les ha concedido una orden de protección en sus distintos niveles. De ellas, 41 reciben el mayor grado de amparo policial, al considerar que su caso reviste un alto riesgo de sufrir una agresión.
ULTIMA VICTIMA Durante el primer trimestre del año 2008 han muerto en España 26 mujeres víctimas de la violencia machista, ninguna de ellas en Extremadura. La región no registra una muerte en estas circunstancias desde el 20 de mayo de 2006, fecha en la que María Antonia Pérez murió en una vivienda de la calle Hernán Cortés de Cáceres, degollada a manos de su novio, Issam Ghayour, quien fue condenado el pasado mes de febrero a cumplir una pena de 22 años en prisión.
A pesar de que hace casi dos años que no hay víctimas mortales en Extremadura, la delegada del Gobierno reconoce que aún queda camino por recorrer para lograr la erradicación definitiva de esta lacra social, y que asimismo hay que mejorar la aplicación de los derechos que garantiza la Ley contra la Violencia de Género. "Hay recursos que fallan, porque si no, no tendría sentido que 26 mujeres hayan perdido la vida en lo que va de año", subrayó.
