Las denuncias por violencia doméstica han aumentado un 45% en la región durante el primer trimestre del año, respecto al mismo periodo del 2002, una dato que según el delegado del Gobierno en Extremadura, óscar Baselga, justifica la puesta en marcha de medidas contra la violencia doméstica. Baselga compareció ayer en rueda de prensa para explicar la Orden de Protección a las Víctimas de Violencia Doméstica --que ha elaborado el Gobierno central y que entrará en vigor a final de julio-- que prevé, entre otras acciones, ayudas económicas para las víctimas de 300 euros mensuales durante 10 meses, y otras adicionales de 600 euros si tienen que cambiar de domicilio.

Durante el primer trimestre de este año se han presentado en Extremadura 237 denuncias, 186 corresponden a la provincia de Badajoz y 51 a Cáceres. El año pasado se presentaron 163. Baselga justificó este crecimiento en que "las víctimas tienen más información y saben dónde pueden acudir". Las oficinas de asistencia a las víctimas de violencia doméstica, ubicadas en los palacios de justicia, han atendido desde enero a abril a 1.093 víctimas (997 mujeres y 96 hombres), frente a las 2.240 del todo el año anterior. La oficina de Mérida es la que más víctimas ha atendido (508).